Todo arrancó con un desesperante mensaje que llegó de forma anónima a la página oficial de la Fiscalía General del Estado de Quintana Roo, en México, que decía: "Fiscales ayúdenme. Quiero denunciar que me escapé de un quilombo o, como dicen aquí, un bar La Consentida, donde me prostituían en contra de mi voluntad y no conozco esta ciudad porque soy de Argentina, pero sé que las calles son Constituyentes y Carretera Federal. Les ruego oculten mi teléfono porque temo por mi vida. Hay tres pibas de 12 o 13 años. Las prostituyen es horrible. Somos 15 pibas que nos quitaron los pasaportes, pero yo me logré escapar. Les ruego nos ayuden".
Aquel dramático mensaje, enviado por WhatApp el 14 de mayo, era sólo la punta del iceberg. Tres días después, las autoridades de México liberaron a 17 mujeres, de las cuales 15 eran argentinas, que eran víctimas de una red de prostitución que se refugiaba en un falso restó de la turística ciudad de Playa del Carmen. Los investigadores reconocieron a este llamado desesperado como la punta del ovillo que llegó hasta el dueño de otros tres locales que se dedicaban a lo mismo en la región.
Lo que se sabe ahora es que los tres hombres detenidos en avenida Constituyentes, entre la carretera federal Cancún-Tulum y la calle 50 Poniente, donde estaban las 17 mujeres secuestradas, están identificados como Luis Alfredo Rangel Lobato, Emmanuel Gueva Cordero y Ángel Alberto Ake Fuentes y, a su vez, procesados por los delitos de trata de personas y explotación sexual.
Además, la información constatada con las autoridades argentinas develó que la procedencia de las chicas argentinas, que tenían entre 20 y 32 años, era bien federal. De Buenos Aires eran tres, al igual que de Chaco y Tucumán. Además se sabe que había una de Salta y otra de Mendoza, mientras que se desconoce de dónde venían las otras cuatro. Por otro lado, algunas de ellas tenían estudios universitarios.
El procedimiento era captarlas por Facebook y WhatsApp, a través de supuestas ofertas laborales en hoteles de lujo de las ciudades de Cancún, Tulum y Playa del Carmen. Una vez que las recogían del aeropuerto, las trasladaban a La Consentida y allí las privaban de sus pasaportes, para que quedaran atadas al lugar, y luego procedían a explotarlas sexualmente, con castigos y la obligación de pagar la manutención de sus días allí.
A partir de lo sucedido, desde el Comité Ejecutivo para la Lucha contra la Trata y explotación de Personas y para la Protección y Asistencia de las Víctimas en la Argentina, a cargo de Verónica Toller, hablaron con quienes realizaron la investigación en el país de América del Norte, para poder dar con quienes estaban detrás de la captación de estas jóvenes vulnerables.
Antes, la Fiscalía de Quintana Roo se había contactado con el cónsul argentino en Cancún, Lautaro Filchtinsky, quien trabajó en satisfacer las necesidades de estas mujeres secuestradas, junto a la Dirección de Asistencia a las Víctimas de la Fiscalía General local. Se sabe que se les dio atención médica y que quedaron alojadas en casas de Playa del Carmen dependientes del Fiscalía General de la República.
También hubo un enlace entre el Comité de Lucha contra la Trata de la Argentina y el fiscal general del Estado de Quintana Roo, Raciel López, con el fin de conocer la situación de las 15 argentinas y contemplar la posibilidad de ofrecerles la asistencia que fuera necesaria hasta su repatriación, aunque esta decisión todavía debe ser consensuada entre el Instituto Nacional de Migraciones de México y del Consulado argentino en Quintana Roo.
Se sabe que, por intermedio del titular de la Fiscalía Especializada en Trata de Personas, Miguel Ángel Godínez, las víctimas "fueron asistidas por un asesor jurídico particular" que ofreció el Ministerio Público Fiscal argentino. "Las jóvenes se encuentran bien, hoy en horas de esta tarde el fiscal Raciel López estará hablando con ellas para asegurarles la protección del Estado mexicano, ya que las chicas quedarían allí en calidad de testigos, y temen por sus vidas", revelaron las autoridades argentinas a La Nación.
"La Fiscalía informó al Instituto Nacional de Migración sobre el operativo y sobre la situación legal de las 15 chicas argentinas para que les extiendan protección en calidad de víctimas y bajo resguardo de la fiscalía. El problema es que entraron como turistas de vacaciones y pasaron luego a ser trabajadoras, con lo cual se convierten en ilegales. Pero al ser víctimas de trata y estar ahora en calidad de testigos, tendrán el apoyo y respaldo del Estado de México", añadieron. También se sabe que contemplan ofrecerles a las víctimas "una visa humanitaria".
La pista en estos momentos es ubicar al enlace argentino con la red internacional de trata de personas. La seguridad respecto a su captura es tal, que las autoridades informaron que entre hoy y mañana habrán nuevos pedidos de captura enfocadas en este vínculo mexicano argentino, que fue la pieza clave para que las 15 argentinas caigan en la trampa.