El muchacho oyó -o creyó oir- ruidos raros. Alertado, llamó al 911. Si era un ladrón, la policía lo detendría y se encargaría de él. Cuando llegaron los uniformados los hizo pasar al fondo de su casa, para que atrapen al malhechor, que ya no estaba. O que nunca estuvo. No importa. Lo cierto es que los policías pasaron al patio de atrás y -oh sorpresa- se encontraron con plantas de marihuana que superaban los dos metros de alto. ¿Cómo termina la historia? Con el denunciante preso.
El joven de San Isidro llamó a la policía porque creyó oir ruidos extraños en su casa.
Según se informó, dos uniformados del Comando de Patrullas de San Isidro llegaron hasta una casa ubicada en la calle Pedernera al 1900 de esa ciudad del norte del Conurbano luego de una denuncia al 911.
“Nos dejó ingresar y revisamos el patio trasero. No había ninguna persona pero sí descubrimos un pequeño invernadero de plantas de marihuana", dijo un jefe policial a DyN. Según se señaló, "muchas de ellas tenían más de dos metros de altura y había no menos de 15 plantines", por lo que ahora la policía está "investigando qué actividad hacía el joven".