27 Octubre de 2016 18:09
Dos semanas antes de asesinar a Claudia Arias, a la tía y a la abuela de Claudia, Susana Ortiz y Selda Díaz, Daniel Zalazar se tomó con macabro humor la noticia del femicidio de Romina Barria (con quien casualmente Zalazar mantuvo una relación íntima en el pasado), en Río Gallegos.
Daniel Zalazar, la sonrisa de un femicida.
"¿Boludo, posta que la quemaron? Jejeje... Yo me acuerdo de la Romi", dice en un primer audio, con una cierta sorna. "Y bue, se lo merecía... ¡algo habrá hecho!", comenta, macabramente divertido, en un grupo de Whatsapp que integraba.
La historia de los audios
Estos audios llegaron hoy a la redacción de BigBang desde Mendoza, por medio de alguien que probablemente se espantó al encontrarlos en su celular. Probablemente terminen siendo parte de la investigación, por su trascendente contenido que revela, entre otras cosas, la ausencia de emoción violenta y la clara postura misógina de Zalazar frente a la violencia de género.
En un tercer audio, tan espeluznante como los anteriores, el hombre que unos días después asesinaría a tres mujeres e intentara asesinar a su hija de tan sólo siete meses y a uno de los hijos de Claudia, de 11 años, completa el concepto. "¡Ni una menos las pelotas! ¡Hay que cagarlas a palos!".
Romina Barria, asesinada el 4 de octubre pasado en Santa Cruz.
Romina Barria fue asesinada el 4 de octubre pasado en Río Gallegos, provincia de Santa Cruz, de donde también es oriundo Daniel Zalazar. Por el asesinato está detenido Jorge Huenumil, pareja de Romina, quien está acusado de clavarle 12 puñaladas y luego incendiar la casa donde vivían, dándose a la fuga con la hija de ambos. El hecho fue calificado como "Doble homicidio agravado por el vínculo y por violencia de género. "
Captura de pantalla de los macabros audios de Zalazar.
Más allá de que Zalazar mató a más de una persona, el modus operandi de un crimen y el otro coinciden: Zalazar también optó por el apuñalamiento y también intentó incendiar la casa, tal vez con la finalidad de camuflar su crimen. Dejó el gas abierto y una vela encendida. Huenumil logró su cometido: los bomberos hallaron el cadáver de Romina cuando lograron apagar el incendio.
El femicida disfrazado de médico.
¿Puede ser que un femicidio haya detonado el otro? ¿Estaba con su risa y con su proclama misógina Zalazar avisando lo que iba a hacer? Algo es seguro. Los dos crímenes son casi idénticos.
Zalazar conocía a la víctima anterior y la idea de su muerte lo divirtió. Ninguna persona se alegra así como así de la muerte de alguien conocido en su juventud y que no le había hecho ningún daño. Salvo que, como Zalazar, odiara a las mujeres y pensara que "¡Ni una Menos las pelotas! ¡Hay que cagarlas a palos! " Salvo que, como tal vez haya ocurrido, ese horrible femicidio le haya dado una idea, no menos horrible.
