por Gisela Nicosia
13 Junio de 2016 09:27
Un caso policial que tiene como víctima a una menor y dos versiones diferentes sobre lo que le sucedió. La noticia impacta y llena de horror a Tandil, que sigue de cerca lo que vivió Magalí, una niña de 13 años que habría sido violada y luego atropellada tras asistir a una fiesta. Pese a eso, según el fiscal a cargo de la investigación, Gustavo Morey, los hechos habrían sido de otro modo.
“En la causa no figura nada de lo que se dice, eso es todo bla bla”, dice una fuente local a BigBang, quien tuvo acceso a la causa.
“En la causa figura que la menor estuvo en una fiesta de cumpleaños, y asistió con su hermana mayor y sus primas. Juan Enrique Cisneros es un amigo de su hermana y en la fiesta se habrían besado y luego de un rato fueron a una habitación de la casaquinta y mantuvieron relaciones”, cuenta. Luego entraron en la pieza unos jóvenes para retirar un cargador de celular y unas camperas, pero según declararon en la causa no habría sido más que eso”, sostuvo.
La nena despertó del coma y dijo que había sido violada "por todos".
Los allegados a Cisneros dicen que es un joven de clase media baja, de 26 años, sin antecedentes y que contó que mantuvo relaciones con Magalí y la acompañó por la ruta, donde fue atropellada.
El médico forense que atendió a la menor enfatizó que sólo determinó “sospechas” de violación. Se trata de Nicolás Ghersetti, médico forense que intervino en el ingreso de la menor de 13 años y que aseguró notar inflamación pero que luego fue derivada para ser atendida y los exámenes no los completó él sino otro equipo médico.
Según los dichos de otra fuente cercana al fiscal, la joven se estaba por retirar de la fiesta. Pero al olvidarse su campera regresó y nuevamente se quedó unos minutos con Cisneros y decidieron volver a intimar. Luego él la acompañó por la ruta donde fue embestida por un repartidor de diarios, de nombre Francisco”, explicó y otro allegado al cuerpo de investigación confirmó esta hipótesis que es analizada.
Oscar Teruggi, Jefe de Gabinete del Municipio de Tandil, adelantó que el Ejecutivo responderá a cada una de las preguntas en nombre de las dos áreas involucradas (Inspección y Prevención Ciudadana) pero adelantó que “desde Inspección no se actuó porque no era una fiesta privada” sino un cumpleaños donde habrían asistido unas 25 personas, lo que sigue con ésta línea de investigación.
Pero la familia de la niña sostiene que se trata de un hecho grave que quieren que se investigue. El abogado que los representa, Maximiliano Orsini, aseguró que la niña despertó gritando que la habían violado entre todos.
Las pericias
Según
Orsini
,
Magalí
despertó en la sala de terapia intensiva del Hospital
Interzonal
Especializado Materno Infantil marplatense en medio de una crisis de nervios y hoy solicitará al fiscal
Morey
, a cargo de la causa, que se lleve a cabo un “informe victimológico y un peritaje ginecológico” de la adolescente abusada, quien “tenía arañazos en el pecho y en la zona abdominal que posiblemente sufrió cuando
quisieron
sacarle la ropa”.
También, el letrado detalló que la niña tenía sangre en su ropa interior, lo que coincide con el sangrado en la zona vaginal y anal.
Mientras tanto la familia de la adolescente sigue reclamando por justicia y apuntan que la niña fue engañada a la fiesta y que había mayores presentes y que habían sido invitados por Facebook. Pero según consta en la investigación, la casa quinta fue el lugar elegido para celebrar un cumpleaños de un joven de 21 años, entre ellos algunos integrantes de Ramón Santamarina.
El hecho saltó a la luz tras el accidente. El domingo pasado, cuando alrededor de las 7 la adolescente fue atropellada por una camioneta en la ruta 226, por donde regresaba de una fiesta en una casa quinta de Tandil, los médicos notaron que tenía signos de abuso. Ahora se espera que Magalí despierte y esté en condiciones de declarar.
