Después de que la jueza en lo Criminal y Correccional N° 49 procesara por homicidio a los tres policías de la Ciudad acusados de haber matado a Claudio Romano, el remisero que fue baleado por oficiales el pasado 1° de octubre en pleno barrio de Villa Crespo, este lunes se llevó a cabo una audiencia en la Cámara del Crimen porteña, donde los defensores de los sospechosos pidieron el sobreseimiento de sus clientes, mientras que la querella y la fiscalía solicitaron que se mantenga el procesamiento en su contra, como ya lo había ordenado anteriormente la magistrada Ángeles Gómez Maiorano.
Aunque todavía hay algunas lagunas en la investigación, se pudo reconstruir que el pasado 1° de octubre el oficial primero Ramón Pérez, la inspectora Beatriz Manzanelli y la oficial Daniela López le dispararon a Claudio Romano luego de que la víctima se bajara de su auto ensangrentado y con algunos cortes en su abdomen y muñecas.
Gracias a las cámaras de seguridad, se pudo comprobar que Romano se acercó a la ventanilla del auto del lado del conductor, y que con una navaja que portaba previamente, le hizo unos cortes al oficial que manejaba el patrullero. Luego de eso, las cosas se salieron de control, y sin intentar retenerlo o desarmarlo, los policías le dispararon varias veces hasta matarlo.
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A raíz de esto, es que la jueza Gómez Maiorano decidió el pasado 18 de octubre procesar a los tres implicados por el delito de “homicidio agravado por haber sido cometido abusando de sus funciones como miembros de la Policía de la Ciudad y por la utilización de armas de fuego”, ya que considera que el hecho se puede dividir en dos partes, con una primera impresión de la situación por parte de los acusados, y luego con la chance de reducir a Romano para sacarle el cuchillo sin ninguna necesidad de abrir fuego contra él.
Los abogados defensores apelaron los procesamientos, y lograron también antes conseguir la prisión domiciliaria para los tres implicados, por lo que este lunes el fiscal de la causa, la querella y los letrados se presentaron en una audiencia oral ante la Cámara del Crimen porteña para discutir la situación de los acusados.
En este tipo de presentaciones, tanto la querella como la fiscalía tienen 5 minutos cada uno para argumentar su pedido, mientras que la defensa suele tener el doble de tiempo, y al final la posibilidad de contestar a las otras partes. "Los abogados abrieron la audiencia con la argumentación típica, sosteniendo que fue legitima defensa, porque se tuvieron que defender de una persona exaltada y armada. También ellos argumentan que al dividir la jueza en etapas el hecho, se fracciona, cuando en realidad hay que entenderlo como un todo, para poder comprender el miedo que sintieron los policías", explicó a BigBang María del Carmen Verdú, abogada de la Coordinadora contra la Represión Policial e Institucional (Correpi) y quien representa a la familia de Romano.
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En este sentido, la letrada aclaró que, según se puede ver en las imágenes de los videos de las cámaras de seguridad, los oficiales tuvieron 43 segundos para reducir a la víctima mientras estaba en el piso casi inmóvil, y que en lugar de hacerlo, hablaron por teléfono y se quedaron sin accionar ante la situación.
"No es cierto que las dos oficiales estaban súper angustiadas por las lesiones de Pérez, porque en el video se ve que ni se acercaron a a ver cómo estaba", cuestionó Verdú, en base a que los defensores indicaron que las dos mujeres además de estar asustadas por la situación, también estaban intranquilas por el estado de salud de sus compañero.
En base a esta presentación, tanto el fiscal general Mauricio Viera como la querella contestaron que los sospechosos debían seguir procesados por los mismos cargos, por lo que al finalizar, uno de los abogados defensores justificó el ataque y dijo que aunque Romano ya no tuviera en su poder el cuchillo, en verdad los policías no podían saber si tenia un arma de fuego. "O sea que lo mataron por las dudas", cuestionó Verdú, quien además aclaró que los tres implicados continúan en libertad.
Según la letrada de Correpi, es importante en esta causa que la jueza haya procesado a los policías no por homicidio simple, sino por homicidio agravado por ser miembro de la fuerza de seguridad, lo que refuerza la idea de que abusaron de su función.
"Es importante decir que los policías tienen abogados particulares, que se los pone el Ministerio de Seguridad de la Ciudad, y que para ellos es gratis, a costa de los ciudadanos que pagan sus impuestos. Un privilegio que no tiene el papá de Claudio, porque si no estuviera la Correpi, tendría que estar pagando un abogado", dijo por último.
Por su parte, la novia de Romano, Lucía Sánchez, dijo a este portal que el fiscal "defendió rotundamente el fallo de la jueza", y que permanentemente los defensores sostuvieron que los policías actuaron en defensa propia. "Ahora tenemos que esperar unos días para que los tres jueces den su fallo, a ver si siguen procesados los policías o no", aclaró.
Del mismo modo, indicó que hasta el momento no se sabe por qué Romano llegó al lugar del hecho herido y con una navaja, y que por este mismo motivo, la jueza mandó a peritar el auto de Romano de nuevo, pero esta vez para ver si hay solo sangre de la víctima o de otra persona.
"Los policías pusieron un perito de parte para ese procedimiento, lo que me parece raro si no tienen nada que ocultar", dijo, y agregó que quince minutos antes de la muerte de su novio, ella había conversado con él por mensaje, por lo que todavía resulta un misterio poder entender qué sucedió en ese poco tiempo.
Finalmente, comentó que según su teoría, los policías conocían a Romano, y que algo previo pasó entre ellos como para que Romano se bajara de su auto y fuera directo a cortarle el brazo al oficial Pérez. "Si algo incrimina a la policía, no lo vamos a saber nunca y lo van a ocultar", cerró desesperanzada.