Con el objetivo de avanzar en la causa que investiga muerte del joven Fernando Báez Sosa, esta mañana se llevará a cabo la primera de las tres ruedas de reconocimiento para determinar quiénes fueron los rugbiers que participaron del brutal crimen cometido el sábado a la madrugada en Villa Gesell y cuál es el grado de participación de cada uno. Hasta ahora, la fiscal Verónica Zamboni, imputó a dos como “coautores” del homicidio, y a los otros ocho como “partícipes necesarios”.
En la rueda de reconocimiento participarán los diez detenidos por el crimen de Fernando y por primera vez estarán de frente a los amigos del joven asesinado que se encontraban esa noche en el boliche Le Brique, donde comenzó la discusión que luego derivó en la terrible golpiza que acabó con la vida del joven de 18 años. También habrá otras personas que vieron de cerca el momento de la agresión y estará presente Pablo Ventura, el falso acusado que el martes a la noche recuperó la libertad.
De todos modos, la defensa de los rugbiers cuestionó la rueda de reconocimiento debido a que las fotos de sus defendidos ya fueron publicadas en los medios de comunicación y sus rostros ya se hicieron conocidos para buena parte de los testigos. De todos modos, el fiscal general de Dolores, Diego Escoda, aseguró que la pericia es clave, ya que alguno de los jóvenes que hasta ahora están imputados como partícipes necesarios podrían ser acusados como coautores.
Hasta ahora, los únicos dos que fueron señalados como coautores materiales del crimen son Máximo Thomsen y Ciro Pertossi, de 20 y 19 años. Los otros ocho están acusados por tener vínculo con el crimen, por instigar y por impedir que los amigos de Báez Sosa pudieran socorrerlo y defenderlo.
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De todos modos, la rueda de reconocimiento no será la única prueba que utilizarán los investigadores. De hecho, ya fueron incorporados a la causa varios videos y se espera el relato de varios testigos, entre ellas una joven que atendía la heladería en la que Fernando compró un helado minutos antes de ser asesinado, y de la adolescente de 17 años que le hizo rehabilitación cardiopulmonar durante varios minutos antes de que llegara la ambulancia.
Anoche el fiscal Escoda señaló que “por la cantidad de personas que agreden, el carácter de los golpes, la forma y la violencia” la sospecha es que “la intención claramente era dar muerte”. Por otro lado, el próximo lunes comenzarán a peritar los teléfonos de los diez rugbiers y del propio Ventura.
Por otro lado, la semana que viene estará listo el resulto scopométrico, que analiza una huella levantada del cuerpo de Fernando y que podría ser comparada con las zapatillas halladas en la vivienda que alquilaban los imputados en Villa Gesell. Eso podría probar quién le dio la patada que acabó con su vida.
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LA VISITA DE LOS FAMILIARES
Este miércoles los familiares de los rugbiers detenidos pudieron visitar a los jóvenes acusados del crimen por primera vez debido a que ya no se encuentran incomunicados. La visita se extendió por tres horas y según publicaron los diarios Clarín y La Nación un testigo describió que “se escuchaban llantos” y que fueron “momentos muy conmovedores”.Fueron varias madres, un padre y algunas hermanas las que pudieron ingresar a la Comisaría 2° de Villa Gesell, donde se encuentran cinco de los diez acusados por la muerte de Báez Sosa, entre ellos Ciro Pertossi. Un ex combatiente de Malvinas que se encontraba en el lugar porque visitaba a otro detenido, Carlos Seoane, dijo que habló con los rugbiers y aseguró: “Los pibes dijeron que estaban tomados, están arrepentidísimos de lo que pasó”.