Frío y sin mostrar arrepentimiento, Daniel Zalazar rompió el silencio que mantuvo desde que fue detenido, tras el sangriento triple crimen que cometió. "Me hicieron sacar", se justificó mientras intentaba explicar las razones por las cuales apuñaló hasta matar a tres mujeres e hirió a dos niños, uno de ellos su propia hija de 10 meses, en el barrio Trapiche de Godoy de Cruz.
"Me hicieron sacar
Zalazar es médico, practica taekwondo y es oriundo de Santa Cruz.
Daniel Zalazar, el profesor de teakwondo de 30 años, llegó a la madrugada a la casa, enfureció y comenzó a apuñalar a Claudia Arias, su ex pareja. Pero la carnicería no terminó ahí: luego fue por la tía de su ex, apuñaló a su abuela, que todavía dormía en su dormitorio. Luego hirió al hijo de Arias, de 11 años y a la beba de 10 meses. Intentó hacer lo mismo con otro hijo de la víctima, Bautista, a quien persiguió hasta el patio con una linterna, pero el nene de ocho años logró escapar y esconderse dentro de un baúl.
El detenido quiso quitarse la vida en la celda.
Zalazar no dió detalles de lo sucedido. Se mostró ajeno al tema, sin signos reflexión sobre sus actos. Fue detenido momentos después de la masacre en el hospital Central. Había llegado con una herida en su mano y alegó que había sido víctima de un robo. Pero las autoridades no le creyeron y se pusieron en contacto con la Policía.
Desde ese momento fue trasladado a la comisaría 7 donde lo imputaron por delito de homicidio agravado, homicidio simple en dos hechos y dos tentativas de homicidio.
Las víctimas: Claudia Arias, Mirta Ortíz y Silda Díaz.
Durante la tarde del domingo, en una de las celdas de la seccional intentó matarse, por lo cual debieron aumentar la seguridad. Fue en ese momento cuando entre balbuceos y se lo escuchó decir "Me hicieron sacar". Luego de sus palabras, se mostró "frío", sin signos de expresión, según describieron los testigos del episodio.
"Estaba tranquilo, pero lo que más llamó la atención fue su frialdad", aseguraron voceros de la investigación. Su confesión no fue realizada ante las autoridades judiciales. Ante el fiscal, Zalazar mantuvo su versión de que había sido víctima de un robo y que nada tenía que ver el triple homicidio.
"Me hicieron sacar", dijo en su celda el acusado del triple crimen de Mendoza.
Asimismo, Zalazar sostuvo que en reiteradas ocasiones intentó acercarse a Claudia, pero que no lo dejaba. Y que, cada vez que acudía a la vivienda, ella llamaba a la Policía para que lo sacaran.
De todas maneras, desde el Ministerio Público indicaron que no contaba con antecedentes de la provincia, aunque investigan si cuenta con antecedentes en Santa Cruz, de donde es oriundo.
Esta mañana fue operado de su mano, dado que la defensa de sus víctimas le rompió uno de los ligamenos. En las siguientes horas será trasladado al penal, en donde permanecerá detenido.