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"Me pregunto si podría haber hecho algo”: Guarino le dio sus condolencias a los padres de Fernando

El joven testificó que los rugbiers ya se habían peleado al menos tres veces.

16 Enero de 2023 12:07
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En la sesión número 11 del juicio por el asesinato de Fernando Báez Sosa que tuvo lugar este lunes, declaró Juan Pedro Guarino, quien estuvo detenido en el 2020 durante 23 días y que fue sobreseído de la causa por falta de pruebas. Según su relato, el no participó ni de la golpiza ni del asesinato, solo lo vio desde afuera. Además, relató que su idea es "ayudar a la justicia por Fernando".

Ni bien comenzó la sesión, luego de jurar que solo iba a decir la verdad, Guarino comenzó a responder las preguntas. En una primera instancia se le consultó con respecto a su vínculo con los imputados: "Con Máximo Thomsen era amigo, jugábamos juntos al rugby. A Blas Cinalli lo conozco por lo mismo, e iba a la escuela que iba yo. Luciano Pertossi el mismo vínculo. A Lucas Pertosi, a Ayrton Viollaz, Ciro Pertossi y Enzo Comelli también los conozco".

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Luego de esto, Fernando Burlando, abogado de la familia de la víctima, realizó su primera pregunta y le consultó con respecto a su amistad con cada uno: "¿Qué clase de amistad tiene con los acusados? ¿Amistad menor, intima?". A lo que Guarino declaró: "Yo creo no con todos tenia una amistad íntima, tenía mas amistad con Ciro Pertossi y Luciano Pertossi". En ese mismo momento, el abogado defensor le consultó: "¿Los acusados tienen apodos?", y la reacción del testigo fue crucial.

Si bien automáticamente dijo que por lo menos de su parte no había apodos para ninguno, Burlando le repreguntó si sabía quien era "Machu", y rápidamente Guarino declaró: "Si, perdón tenés razón. Machu es Maximo Thomsen. Chano es Luciano Pertossi, Perto no se quien es". El abogado continuó:  "Ahora que se te refrescó la memoria, me podes decir los sobrenombres de otros de los que estaban en la casa?", pero el amigo de los rugbiers comentó que no sabía más.

Luego de las primeras preguntas con respecto a su amistad, Burlando le pidió que relatara cómo fue el día y la noche del asesinato. "Lo que yo me acuerdo, nos levantamos tarde porque el día anterior habíamos salido, fuimos a la playa, ahí volvimos a la casa, nos cambiamos nos bañamos nos preparamos. Yo había hablado con una compañera de la escuela para hacer una previa.. No recuerdo muy bien pero entramos por donde te dejaban, y después fueron entrando los chicos", comenzó afirmando Guarino.

"La noche fue normal hasta que yo estaba parado en las escaleras de la pista de abajo y veo que cerca mío, en la barra, Thomsen y Benicelli discutían con uno o dos chicos. Después me enteré que fue porque se había volcado un vaso. Hubo una avalancha de gente y yo me caigo en la pista. Ahí veo como sacan a Thomsen y a los otros del boliche. No me iba a quedar solo adentro y me fui", explicó el testigo.

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Según lo que contó en ese momento en el que se retiro del boliche, fue cuando empezó a ver la situación de a partes: “Salgo y veo a mi izquierda que Luciano Pertossi se estaba peleando con otro chico. Él cruza y voy a ver cómo estaba él. Me acuerdo que en una parrilla en diagonal, con unos bancos lo siento, y le pregunto cómo estaba. En eso viene Ciro Pertossi y luego escucho gritos a mi derecha, Luciano y Ciro se levantan y se van. Yo imaginé que iban a pelearse de vuelta y no lo podía creer. Por lo que yo miro, veo a todos los otros los perdí y veo a Máximo Thomsen y a un chico tirado en el piso que después me entero de quien era. Me lo entero al otro día y cuando vi eso no lo podía creer me enojé muchísimo y me fui”.

Además agregó: “Habíamos ido de vacaciones a pasarla bien, ellos ya se habían peleado otras veces. Yo había hablado con mi mamá y mi novia que si volvía a pasar yo me iba a volver de la vacaciones, por eso digo que no lo podía creer". También declaró que sintió vergüenza al verlos pelear de nuevo que la diferencia con las peleas que ocurrían en Zárate era que allá podía irse a su casa, y en Villa Gesell no.

En la sesión comenzó a reproducirse en la pantalla un video con imágenes de la Avenida 3 de la ciudad balnearia y Guarino fue citado a señalar con un puntero donde fue la pelea: "Supongo que fue acá". “Luciano cruza la calle y acá adentro -señala el restaurant Cipriany- hay unos bancos con unas meses y lo siento. Estaba exaltado porque se había peleado. No recuerdo cómo estaba vestido”, comentó. 

Luego de esto, Burlando le preguntó con respecto a la situación posterior luego de la pelea:  “No los encuentro, ellos me encuentran llegando a la esquina, que luego los detiene la Policía en un supermercado... Yo iba caminando, los detuvo la Policía y como yo no había participado, seguí caminando. Seguía sin creer lo que estaba pasando, seguía enojado entonces no vi mucho”. 

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Más tarde el abogado de Graciela Sosa y Silvino Báez le consultó sobre su actual relación con los imputados, y Guarino expresó: “No sé si estoy enemistado, pero intenté cortar todo tipo de relación. Pude hacerlo cuando salí del penal de Dolores. No con todos tenía una amistad íntima. Tenia mas amistad con Ciro y Luciano Pertossi".

A raíz de esto, Se proyectó en la sala el video de la pelea: “Ese parece Blas. A Luciano no lo veo. Por el porte y la camisa, parece Enzo Comelli. No veo bien, pero este parece que tenía colita, como Mati Benicelli”. El fiscal Juan Dávila tomó la palabra. Le preguntó si se ubica a él mismo en la escena, algo que negó. Tampoco pudo distinguir a Máximo Thomsen y a Ciro Pertossi.

Lo cierto es que en un momento dato, la jueza María Claudia Castro le consultó a Guarino si estaba prestando realmente atención al video de la pelea, ya que por momentos desviaba la mirada. "Intento", respondió el joven. Hasta que en un momento se detuvo y le pidió al Tribunal N°1: “No quiero ver más, perdón”. “Primero parece que se agacha, se levanta y después lo pierdo”, agrega sobre la conducta de Luciano Pertossi en la secuencia.

Luego de remarcar que Luciano Pertossi "estaba exaltado porque se había peleado", le mostraron una foto en un quincho, obtenida de unos de los chats de Blas Cinalli de WhatsApp: "Esa foto no me acuerdo en que momento la tomaron. Me hace mal ver los videos, todavía no puedo creerlo, esto que pasó es una mierda. En la foto están Blas Cinalli, Alejo Milanesi, Tomás Ítalo Colazzo y yo. Luciano y Ciro Pertossi, Enzo Comelli y él parece Máximo Thomsen”, sumó. 

Antes de finalizar, Guarino pidió la palabra y se dirigió directamente a los padres de Fernando. "Quiero por favor decir algo. Darles todas las condolencias a la familia. Por una cuestión de respeto, no se los dije antes porque quería estar afuera de la causa para que sepan que es sincero. Todos los días pienso si podría haber hecho algo para evitarlo", sentenció.

Durante la declaración de Guarino, Luciano Pertossi no paraba de "mover las piernas" debido a que se trató de un testimonio clave para identificarlo, no solo en la escena del crimen sino también por su vestimenta y aspecto. Otro de los acusados que se mostró muy nervioso fue Máximo Thomsen al momento que a Guarino le mostraban las imágenes de las zapatillas ensangrentadas, el pantalón y la camisa que usó aquel día.

 

Por esta razón, el imputado agachaba la mirada y se apretaba el pantalón con sus puños. El papá de Ayrton estuvo sentado en el medio de las madres de los rugbiers y al lado del padre de Thomsen. De hecho, el hermano de Máximo se quedó dormido durante la audiencia al igual que el padre del acusado. El papá de Lucas Pertossi, por otra parte, pasó el 80% de la audiencia con la mirada hacia abajo, como si estuviera rezando, y apoyado en las barandas del Tribunal. No obstante a su testimonio, aún faltan declarar Alejo Milanesi, el otro sobreseído, Tomás Colazo, el "rugbier número 11" y las madres de Thomsen y Cinalli.