Sasha Bianca Taveli González tenía 13 años y fue hallada sin vida el último viernes en su casa del barrio Agustoni, en Pilar. Según trascendió, la adolescente había denunciado que fue abusada en reiteradas ocasiones por varios miembros de su familia y un comerciante de la zona. De hecho, un video que la propia víctima publicó horas antes de quitarse la vida sería clave en la investigación.
El breve clip tiene una duración de 20 segundos y fue publicado originalmente en la plataforma TikTok. Se trata de un corto de 20 segundos donde se ven de manera sucesiva imágenes de Sasha cuando era pequeña y luego los rostros de cuatro hombres y dos mujeres, quienes serían sus abusadores o cómplices. De fondo, la música dice: “Me quitaron la vida / me la arrebataron / triste aquel día / el sol se apagó / lloraron las flores / lloraron los ángeles”.
En el video, la adolescente sumó algunas fotos ilustrativas sobre el abuso infantil y escribió: “Me quitaron la vida, me la arrebataron”. Entre los presuntos abusadores figuran su padrastro, un hermanastro y un comerciante de la zona. Incluso, un grupo muy numeroso de vecinos salieron el domingo a reclamar justicia e incendiaron la casa y el auto de éste último, quien tiene un almacén en la calle México.
Los vecinos, aparentemente, se enteraron de la noticia ese mismo domingo por la noche y tras conocer el triste desenlace de la menor, se unieron para hacer justicia por mano propia. "Ella sufrió muchísimo y lo peor es que ella buscó ayuda y no la ayudaba nadie. Antes de quitarse la vida le dejó una carta a su hermanita, que su 'mamá' rompió.. También, antes de quitarse la vida -ahorcándose en su casa- hizo un video donde aparecían los hombres que la violaban", afirmaron sus amigos.
Sin ir más lejos, A. ,una de las amigas de Sasha, dialogó con el portal local Resumen y afirmó: "Sasha me contó en el baño del colegio que era abusada por un vecino, su padrastro y su hermanastro, pero que su mamá no le creía". De acuerdo con la joven, la víctima se había animado a contarle el infierno al que era sometida diariamente por su familia hace poco más de un mes.
Los compañeros de la menor sostienen que la madre de Sasha era cómplice de los abusos y que la “entregaba” para no pagar el alquiler. “Ella dio aviso a muchos adultos, profesores, perceptores y directivos de su colegio y nunca la ayudaron en nada. Ella sufrió muchísimo y lo peor es que buscó ayuda y no la ayudaba nadie”, le manifestó al mismo portal otra allegada a la víctima.