06 Octubre de 2016 08:57
Con el respirador automático cubriendo su cara, rodeado de cables y tubos, el bebé que habría sido abusado sexualmente muestra una leve mejoría y ya se muestra inquieto en la terapia intensiva del hospital Penna, en Bahía Blanca: abre y cierra sus manos, mira para todos lados y se mantiene despierto. Con cada uno de sus movimientos, su papá Pablo, que no abandona jamás los pasillos del centro de salud, poco a poco comienza a sentir un poco de alivio..
Todo comenzó cuando la madre del menor lo llevó a la guardia asegurando que tenía fiebre y un cuadro de gripe. Pero el pedíatra encontró evidencias de un calvario en el cuerpo del niño: golpes, abuso y una infección que atentaba gravemente contra su salud.
“Esto se volvió una pesadilla, quiero despertarme y ser el de antes con mi hermoso ángel que la vida me dio. Duele y lastima en el alma todo esto, te amo”, posteó Pablo hace unos días en su cuenta de Facebook, acongojado por la situación, luego de enterarse sobre la denuncia que realizaron los médicos que atendieron a su hijo.
Pablo junto a su madre y su hijo.
“Esto se volvió una pesadilla, quiero despertarme y ser el de antes con mi hermoso ángel que la vida me dio
El pedíatra y algunos colegas suyos diagnosticaron un cuadro delicado: una infección interna sin un origen claro. Pero luego, al revisarlo, todo empeoró: encontraron evidencia de abuso sexual y maltrato.
De inmediato, la Policía intervino en el hospital para tomar declaración a los responsables del niño. De esa manera comenzó una investigación sobre el entorno familiar del bebé. El tío, el abuelo, el novio de la madrina y un allegado, todos miembros de la familia materna, debieron someterse a pericias y declarar sobre el tema ante la Justicia.
El lamento de un padre desesperado.
La dura recuperación y la salida del calvario
Los hematomas, las lastimaduras y la infección severa desaparecen lentamente. Mientras tanto, el nene ya mira dibujitos como prueba de su mejoría. La esperada noticia la confirmó por las redes sociales una amiga de Pablo.
El niño tiene 22 meses y lentamente mejora su cuadro.
LA MEJORÍA
“Felíz, Felíz! Está despierto, ve dibujitos, juega, agarra la mano! Se quiere ir mi vida, no entiende dónde está... Pero ya vas a irte de ahí bebé!! Falta poco! Mañana puede que le saquen el respirador! Gracias amigo por mantenerme al tanto del primer día!! Feeeeelizzz felizzzzz”, posteó la joven y a los pocos minutos se sumó Pablo, con alegría.
La felíz noticia la comunicó una amiga de Pablo.
“Me diste un guerrero, un gran luchador...noticias que alegran mucho después de noticia que duelen... sos mi vida bebé”, describió emocionado al esfuerzo que hace su hijo para recuperarse.
Las imágenes del niño en sus tardes de juegos.
Pablo está separado de la madre de su hijo, es prefecto, vive en el Conurbano bonaerense y visita al niño en sus francos. Desde que estalló el aberrante escándalo, se aferró con más fuerza que nunca a su fe religiosa, aunque al mismo tiempo no sale de su asombro. Según contó, se enteró de la terrible noticia por los médicos que atendieron a su hijo.
Se organizaron cadenas de oraciones.
La esperanza de Pablo para que su hijo mejore.
Asimismo, los amigos y conocidos de Pablo le enviaron mensajes de aliento y se organizaron cadenas de oraciones.. “Fuerza chiquito! Fuerza! Dale que todos te estamos esperando!!”, rogaban con amor algunos de los posteos.
El apoyo de los que quieren al menor.
NO ES NORMAL
Pablo, habló con el medio local LA BRÚJULA 24 y dijo que "la persona que hizo algo así no es alguien normal". Envuelto en dolor y bronca por lo que sufre su hijo, el hombre no quiso señalar a ningún sospechoso, aunque aclaró que "todo eso lo va a determinar la Justicia, ahora sólo importa mi hijo".
Pablo espera que su hijo mejore pronto y no se mueve del hospital.
Según informaron los medios locales, en los pasillos del hospital, los parientes de Pablo increparon al abuelo materno del niño. Lo acorralaron y le gritaron "violador". Debieron interceder autoridades para apaciguar la tensión que se produjo en ese momento.
"Los síntomas que uno espera del nene ahora los tiene: reacciona, se mueve y te agarra la mano, abre los ojitos. Gracias a Dios, esas son muestras de que va avanzando. Sólo sabemos que tenemos que esperar", remarcó papá del bebé.
"Los síntomas que uno espera del nene ahora los tiene: reacciona, se mueve y te agarra la mano
Lo que asegura Pablo es que se enteró de la denuncia por los médicos, pero desconoce qué puede haber sucedido. La madre del bebé es una joven de 16 años que vive con sus padres y que en las últimas semanas dejó al menor al cuidado de distintos parientes.
"En las ultimas semanas, el nene compartió tiempo con toda la familia. Yo no vivo acá, trabajo en el Gran Buenos Aires. Desconozco lo que dice la investigación, hoy pienso solamente en él, en mandarle fuerza. Y agregó: "No es una persona normal la que hizo esto. Alguien normal, si quiere al bebé no puede hacer algo así".
"En las ultimas semanas, el nene compartió tiempo con toda la familia
Además, sobre la relación que lo une con la madre de su hijo y con los abuelos maternos, indicó que "es de respeto, sólo por el bebé". Y también manifestó que no le preguntó nada a la chica por el momento. "Sólo quiero que mejore mi hijo para luego buscar a los responsables", finalizó.