"No hay ninguna denuncia de un niño desaparecido en el partido de General Alvarado ni en el de General Pueyrredón. Es un verdadero misterio".
Una fuente policial al tanto de la investigación por el hallazgo del cuerpo de un niño mutilado en un arroyo situado en el límite entre Mar del Sur y Miramar reconoce que el caso sólo genera desconcierto y estupor entre los pesquisas.
El cuerpo encontrado en el arroyo La Totora estaba mutilado. Le habían cortado las manos, los pies, la faltaban los dientos, los órganos, los genitales y el cerebro.
Los policías hiciero consultas en casas de la zona.
Según la autopsia el cuerpo sería de un niño o niña de dos o tres años. No se pudieron obtener mayores precisiones por la mutilación y por el estado en que se encontraba. El cuerpo fue encontrado en la madrugada del martes y se presume que la data de la muerte podría corresponder a siete o diez días antes.
Que ninguna familia haya denunciado la desaparición de un menor, no hace más que generar las dudas entre los investigadores. Durante el verano, en febrero, hubo un caso de un adolescente desaparecido en Mar del Sur, un pueblo situado a 17 kilómetros de Miramar.
La Policía puso en marcha un gran operativo de búsqueda y controlaba coche por coche. Finalmente, el adolescente fue encontrado en Mar del Plata, en casa de un familiar.
Los policías buscaron más rastros en el lugar donde se encontró el cuerpo.
Por eso a los policías de la zona les llama tanto la atención que no se haya denunciado ningún caso de un niño desaparecido en la zona de Miramar o en Mar del Plata, con una población mucho mayor.
El cuerpo fue encontrado por un hombre que vive en Mar del Sur y que volvía desde Miramar en bicicleta. Fue él quien dio aviso del hallazgo en el destacamento policial que hay en Mar del Sur, un pueblo que cuando termina la temporada de verano sólo reúne a unos pocos cientos de habitantes.
La fiscalía a cargo de la causa ordenó que se realizara una nueva búsqueda en el lugar donde fue encontrado el cuerpo y los policías hallaron un pantalón, una camisa y un pelo que podrían ser de la víctima y un un trozo de sábana donde pudo haber sido trasladado el cadáver.
Primero se encontró un un pantalón y una camisa de talle niño, similar a la contextura del cuerpo, encontrado a la altura del arroyo, no muy lejos de la ruta 11.
También se encontró un cabello y un trozo de sábana en un sector ubicado a 15 metros de la ruta, entre la banquina y un alambrado, que ahora se cree pudo ser el sitio original donde los autores del hecho dejaron el cuerpo.
“Hay huellas hemáticas de arrastre. Creemos que ahí pudo haber sido depositado el cadáver y luego los perros y otros animales lo arrastraron hacia donde ayer fue encontrado”, dijo un jefe policial.
Dejaron el cuerpo
Otras fuentes dijeron que el cuerpo podría haber sido dejado más alejado de la ruta y que luego pudo haber sido arrastrado por las aguas del arroyo o por animales.
El hecho de que el cuerpo le hubieran vaciado los órganos, dio pie a toda clase de conjeturas en los comentarios de los medios de la zona, referidos a tráfico de órganos, un mito urbano difícil de comprobar.
Otro policía recordó otros casos de niños muertos en Mirarma en los últimos años y que luego se comprobó que habían sido víctimas de algún familiar cercano.