10 Junio de 2024 10:42
Un milagro ocurrió esta mañana a la salida del boliche bailable Input en el barrio porteño de Palermo, luego de que un adolescente de 17 años esquive a la muerte por el disparo que impactó en su cráneo y le hizo un surco en el cuero cabelludo, sin ingresar en su cerebro. Su agresor escapó en un Toyota Etios que fue encontrado en el barrio Zavaleta, del otro lado de la Ciudad Autónoma de Buenos Aires (CABA). Investigan un posible ajuste de cuentas por drogas.
La definición religiosa de "milagro" no es una libertad narrativa, sino que así lo describió el titular del Servicio de Atención Médica de Emergencias (SAME), Alberto Crescenti, quien se acercó al local de Gorriti y Juan B. Justo y derivó al joven al Hospital Fernández, junto al personal de la Comisaría 14a que intervino en el caso.
"Está bien, nació de nuevo", soltó el profesional de la salud en referencia al rol del azar en que no haya fallecido la víctima. Según contó, el balazo "le hizo una escoriación" en el lado izquierdo del cuero cabelludo. "La bala le hizo un circuito en el cuero cabelludo del cráneo, por suerte el chico está bien", explicó. También insistió con que la bala "no entró en el cráneo", ante la sospecha de muchos y muchas de las presentes.
Si bien el Toyota Etios blanco desde el cual dispararon contra la víctima apareció en un playón en la calle Iriarte al 3900, en el interior del barrio Zavaleta, al principio el personal interviniente de la Policía de la Ciudad activó un operativo cerrojo por Gorriti en sentido a Scalabrini Ortiz, con el fin de encontrar a los agresores.
Miembros de la Policía Científica de esa fuerza ahora deberán peritar el rodado para dar con alguna pista más certera que aporte identidades a quienes atacaron al baleado. Por el momento, la teoría más fuerte que tiene la investigación es que hubo una discusión con respecto a drogas entre la víctima y su agresor.
A partir de testimonios de testigos que pudieron presenciar lo ocurrido, se pudo reconstruir que hubo una discusión muy fuerte dentro del local bailable y que esta continuó afuera, cuando el personal de Seguridad retiró a los presentes al fin de la jornada, cerca de las 7 de la mañana. Un llamado anónimo al 911 fue el que develó lo que había ocurrido y el que le dio aviso a la Policía de lo ocurrido en la fiesta "La Fresa".
Según reportaron fuentes de la investigación, la víctima tenía varias bolsas de tusi y cocaína entre sus pertenencias. Esta, y el lugar en donde hallaron el vehículo, es una de las principales razones por la que se sospecha que el origen de la discusión fue alguna transacción de drogas fallida, que derivó en el ataque.