27 Septiembre de 2015 13:45
La causa del “narcoarroz”, que salió a la luz hace diez días, cuando la Gendarmería Nacional secuestró entre 20 y 30 kilos de cocaína en un depósito de Rosario, sería el puntapié inicial para entender el desembarco de un importante cartel narco colombiano en la Argentina, liderado por los hermanos Triana Peña, que aunque no estarían en el país, tendrían documento argentino.
Gendarmería Nacional secuestró durante el operativo entre 20 y 30 kilos de droga.
Las operaciones del Cartel de Los Urabeños en el país por el momento son materia de investigación judicial. Se estima que el poderoso cartel colombiano operaba no sólo en Buenos Aires, sino también en Tucumán, Santa Fe y Mendoza. En todas esas provincias contaban con todos los eslabones que cubrían cada una de las operaciones, ya sea desde el plano económico hasta el operativo. Según La Nación, además había escalafones bien definidos: desde jefes y sicarios, hasta químicos y profesionales para lavar el dinero.
El Cartel de los Urabeños estaría liderado por los hermanos Williams y Erman Triana Peña. Según la Justicia, el entramado es aún mayor que la causa del “narcoarroz”, cuando descubrieron hace diez días la cocaína escondida en embolsados del cereal. De todos modos, esa causa toma relevancia debido a que confirmaría el desembarco de la banda narco a la Argentina, que habría llegado en 2012.
La causa sería el puntapié inicial para descubrir la llegada de un cartel colombiano en la Argentina.
El objetivo de la banda era exportar a Europa importantes cantidades de cocaína escondida en cargamentos de arroz. Según La Nación, blanqueaban en la Argentina el dinero de las ventas ilegales por medio de nueve empresas manejadas por el abogado Guillermo Hisinger, ex subsecretario de Coordinación del Ministerio del Interior durante la primera presidencia de Carlos Menem.
Pero no se trataría del único aporte que recibieron los líderes del cártel de los Urabeños. Parte del cargamento descubierto el viernes de la semana pasada fue hallado en la vivienda del médico oncólogo Gabriel Zilli, quien está en la mira judicial por ser el presunto químico que realizó la compleja fórmula para cristalizar la droga en los granos de arroz.
En el operativo en la casa del médico oncólogo Gabriel Zilli hallaron alrededor de 4 kilos de cocaína.
En un principio, el plan de la banda se encontraba en una fase de prueba: la intención era chequear la ruta de la droga y la recorrida que haría. Desde Buenos Aires partiría hacia Guinea-Bissau y de allí hasta Portugal. Pero el operativo “Arroz africano” encabezado por la Gendarmería, y que culminó con nueve colombianos y tres argentinos detenidos, frustró ese objetivo del cártel.
La sospecha que tienen los investigadores judiciales es que la droga no era producida en la Argentina, sino que llegaba al país desde Santa Cruz de la sierra, en Bolivia, en pequeños aviones que aterrizaban en pistas ilegales en la provincia de Chaco.
Pero las pistas continúan: en diversos allanamientos llevados a cabo en Nordelta, Palermo, Retiro, Rosario, Mendoza y Tucumán encontraron no sólo la documentación de las nueve empresas relacionadas al cartel, sino que también hallaron alrededor de 6 millones de pesos proveniente del narco.
Se trata de la primera causa que puso al descubierto el funcionamiento de una banda narco colombiana en la Argentina, en un trabajo conjunto entre el juez federal Sergio Torres, la Procuraduría de Narcocriminalidad, la AFIP, las fuerzas federales de seguridad y la Procuraduría de Criminalidad Económica y Lavado de Activos (Procelac).