Milena tenía tan solo dos años, fue brutalmente asesinada a golpes y por el hecho fueron detenidos su madre, Milagros Esther Torres, de 22 años, y su padrastro, Darío Eduardo Chamorro, de 26. Ambos la trasladaron al hospital Héroes de Malvinas de Merlo sin signos vitales y señalaron que la nena se había caído de la cama mientras miraba la televisión con su hermanastro de 4 años en la casa que comparten en la localidad de Mariano Acosta, en la zona Oeste del Conurbano Bonaerense.
De acuerdo con su primer relato a los médicos, fue Chamorro quien escuchó un ruido fuerte y al llegar a la habitación descubrió que la beba "se había caído de la cama". Como la nena reaccionó, le preguntó "si estaba bien", luego cenaron y al día siguiente, cuando regresó de su trabajo, notó que la chiquita comenzó a manifestar distintos problemas como perdida de conocimiento. Pero todo era mentira.
Las placas radiológicas determinaron que Milena sufrió golpes de distinta evolución y en distintas partes del cuerpo. "Era evidente una lesión importante en la tibia de una de sus piernas”, describieron los investigadores. Como si esto fuera poco, la autopsia reveló que la menor sufrió "un golpe en la cabeza muy fuerte y una laceración en el hígado, con hemorragia interna". "La nena tuvo agonía prolongada, agonizó toda la noche", detallaron los profesionales.
Además, aclararon que la nena "tenía hemorragias internas, golpes en la cabeza, una de sus piernas quebradas y más de 15 lesiones en el cuerpo". Sin ir más lejos, los médicos que asistieron a Milena observaron que la pequeña presentaba un hematoma en el rostro del lado derecho y otro en el abdomen, por lo que se dio intervención a la Policía y la Justicia.
La autopsia señaló que la nena de dos años presentaba un "traumatismo de cráneo con sangrado, úlcera en la vejiga con daño hepático, traumatismo de abdomen con lesión hepática y una fisura en la tibia de la pierna derecha de aproximadamente un mes". La nena estaba bajo la custodia de su madre desde hacía unos tres meses, luego de que un Juzgado de Familia de Pilar le restituyera la tenencia de la menor, quien vivía anteriormente con su padre biológico, Franco Sena.
Angustiado y derrumbado por la muerte de su hija, el hombre acudió a las redes sociales y pidió Justicia. "Que descanses en paz hija, te voy a extrañar mucho, hija. No sé cómo voy a hacer para poder seguir adelante, te amo hija...te voy a extrañar mucho amor de papá.. no encuentro palabras para expresar el dolor que siento...", publicó tras el crimen Sena en su muro de Facebook.
En otra publicación, el padre de Milena agregó: "Es la justicia que tenemos. Como padre estoy destruido. Ahora que se haga justicia por mi hija. Y que no los larguen en 2 o 3 años como pasa muchas veces, que paguen lo que hicieron". El hombre se refirió así a Torres y a Chamorro, quienes se negaron a declarar frente a la fiscal Adriana Suárez Corripio, a cargo de la Unidad Funcional de Instrucción UFI N° 8 de Morón.
Las extrañas y aberrantes publicaciones que hacía la madre de Milena, la beba de dos años asesinada a golpes
La funcionaria judicial los había acusado a los dos del delito de homicidio agravado por el vínculo, pese a que el hombre no es el padre; pero la Justicia de Garantías no le dio la derecha y le endilgó a Chamorro el delito de homicidio simple cuando convalidó la detención. Tras conocer la detención y la imputación, Franco expresó algo de alivio: “Se hizo justicia hija. Ahora descansa en paz mi amor”.La Justicia también decidió reubicar al hijo de Chamorro de 4 años que, según dijo el acusado, “la madre lo abandonó cuando tenía un año porque se parecía mucho a él y no quería verlo más”, contaron. Milena vivía con sus dos hermanastros. Cada uno de los hijos tenía un padre distinto. Los tres, después del allanamiento, tenían claras señales de maltrato. Incluso, a uno de ellos tuvieron que tomarle los signos vitales porque pensaron que estaba muerto.