20 Enero de 2023 11:58
"Creo que dentro de 10 años voy a estar haciendo lo que me gusta y disfrutando mi vida". Con estas palabras comienza la carta que Fernando Báez Sosa se escribió a sí mismo hace diez años y que guardó entre sus pertenencias junto al resto de sus principales recuerdos personales.
La madre del joven asesinado el 18 de enero de 2020 a la salida del boliche Le Brique de Villa Gesell, Graciela Sosa, reveló el conmovedor texto a días de que comiencen los alegatos en el juicio contra los ocho jóvenes de Zárate imputados por el crimen. "Poder cumplir los sueños, objetivos, y expectativas que tengo, darles regalos a mis padres, tratando de darles lo que me dieron", son algunos de los anhelos que expresaba Fernando por aquel entonces.
"¡Mintió!": Burlando denunciará por "falso testimonio" al perito que puso en duda la autopsia
El chico falleció con 18 años e iba a estudiar Derecho en la Universidad de Buenos Aires (UBA). "Espero ya tener una pareja, una estabilidad, y comodidad económica", confesaba en la carta a él mismo que su mamá reveló en diálogo con Clarín. El lugar donde Fernando guardaba este recuerdo era una caja celeste de zapatillas que también resguardaba su chupete de nacimiento, 12 medallas deportivas, distintos souvenirs de cumpleaños de 15 y un muñeco de peluche del Hombre Araña de su infancia, cocido por su mamá luego de que volviese "destrozado" del colegio cuando apenas su altura sobrepasaba la cintura de su papá, Silvino.
"Amor, familia, amistades, cariño, unión, felicidad, conocimiento, viajar, conocer, y conectarme", eran los deseos que proyectaba para él mismo Fernando y la misiva concluye con una confesión: "Mi misión es conectar, amar, brillar y servir. Mis valores centrales son amistad, independencia, placer, relaciones valiosas y el tiempo libre al servicio de las personas, la exploración de la mente, los deportes y la autoayuda”.
"Sentimos el apoyo": Silvino y Graciela antes del escrache y cómo cambiará el operativo de seguridad
Las palabras que deja en la carta a sí mismo son respaldadas por el testimonio de las personas que lo conocieron, como sus amigos y sus padres, Graciela y Silvino Báez Sosa. La semana que viene comenzarán los alegatos de la querella y de la defensa en el Tribunal Oral Criminal 1 de Dolores. Antes hubo 13 audiencias donde declararon peritos, testigos directos e indirectos y algunos de los imputados, entre ellos, Luciano, Lucas y Ciro Pertossi, Máximo Thomnsen y Blas Cinalli.
Los padres de Fernando estuvieron presentes en la gran mayoría de las declaraciones del juicio, mientras que afuera cientos de personas pedían "justicia" y castigo para los responsables del crimen. "Estoy bien, estoy entera. Mi foco está puesto en la misa de hoy", le había reconocido Graciela a BigBang, desde el pasillito en el que siempre se refugia durante los cuartos intermedios. "No me sorprendieron las declaraciones", sumó, en alusión a los crudos testimonios de los Pertossi y Cinalli.