En diciembre de 2016, el reconocido golfista cordobés Ángel "Pato" Cabrera fue imputado por una fiscal de Villa Allende por "violencia de género", luego de ser denunciado por su ex pareja, Cecilia Torres Mana. La mujer de 37 años contó que Cabrera la retenía, "amenazándola" a ella y a su familia. "No podía separarme. Y cuando estuve separada me amenazó y temí por la vida de mis familiares. Decía que yo era de él o de nadie. No había forma de sacármelo de encima. La Justicia no entendía y me preguntaban por qué seguía. Él es una persona que rompe todos los límites y la vida de mi familia corría peligro”, contó.
En una entrevista que dio con el diario cordobés La Voz, Torres Mana contó que padeció "maltrato físico y psicológico" entre el 2017 y el 2020 de parte de Cabrera. “Cuando él viajaba, yo estaba en mi casa, y cuando volvía, iba a la suya. Vivía amenazándome, me perseguía, porque él tenía en mente que yo podía estar con alguien más", relató.
Y siguió: "Me prohibió ver a mi hermano Cristian y desde que conoció a mi familia fue terrible, porque no me dejaba ir a verlos. No podía ver a mi mamá que se estaba muriendo de cáncer, porque decía que podía conocer a otra persona. Me hacía videollamadas y tenía que mostrarle con quién estaba y dónde estaba. No podía llamarme nadie, ni siquiera mi hermano, y decía que no tenía que verlo porque podía presentarme a un amigo”.
Durante su relato, la mujer reveló que tuvo que soportar un verdadero calvario con el golfista, a punto tal que él “le deseó la muerte” a su madre mientras estaba internada. “Ella escuchó eso. Si estaba con sus amigos en una reunión, yo debía estar en el dormitorio, sin conexión a Internet. Él tiene una vida muy turbia, por la gente y los gustos con los que se maneja", dijo.
Y continuó: "Me obligaba a aceptar sus otras relaciones”. En su descargo, contó que un día él estuvo cerca de atropellarla con su vehículo y que la amenazó con una cuchilla. “Cuando me puso la cuchilla en el cuello, me decidí a volver con Nayi”, explicó sobre el cambio de abogado que tuvo en sus proceso judiciales, ya que durante un tiempo dejó el asesoramiento de Carlos Nayi.
Actualmente, Cabrera enfrenta un proceso de enjuiciamiento en dos causas acumuladas por violencia de género en su contra, ambas hechas por su ex pareja: se trata de una por "lesiones leves calificadas y amenazas", del 2017, y otra por "lesiones leves calificada y hurtos" del 2018. El golfista está detenido por una acusación de violencia de género y fue extraditado esta semana desde Brasil, donde permaneció preso durante cinco meses.
Cabrera está detenido en Puerto Iguazú, por donde ingresó a Argentina luego de estar preso en Río de Janeiro, lugar en el que fue aprehendido mientras regía el pedido de captura internacional hecho en agosto de 2020 por la jueza Mónica Traballini, compareciendo los pedidos la fiscal de la Cámara II en lo Criminal y Correccional de Córdoba, Laura Batistelli y el fiscal de Violencia Familiar de Córdoba, Cristian Griffi.
Por primera vez en varios meses, Cabrera hizo declaraciones, las cuales brindó a Canal 12 de Córdoba vía telefónica desde Misiones, en las que dijo que su situación "es un poco difícil. Nunca pensé estar en este momento, y la pasé bastante mal en estos cinco meses. Estuve muy mal, me compliqué de salud, físicamente, porque todo se iba dando así y cada vez tenía más miedo. No estaba cómodo”.
Según el imputado, su ex parewja "creó un monstruo" de él y aclaró que demostrará ante la justicia que es inocente. “Crearon un monstruo del ´Pato' Cabrera, pero voy a demostrar con la verdad que soy totalmente inocente. Estoy dispuesto a presentarme y demostrar que no es como se dijeron las cosas. No es como se llevó adelante todo esto. Nunca pensé que podría haber tanta saña, tanta bronca”, manifestó.
Al ser consultado sobre su salida del país en agosto pasado, por lo que la Justicia cordobesa solicitó que regrese, afirmó: “Me fui en vuelo de línea a Miami. Me fui normalmente como lo hice toda la vida, a trabajar dignamente. En ningún momento me escapé, Si tenía que avisar o tenía que pedir permiso para salir yo no lo sabía. Estaba en Estados Unidos y todo el mundo sabía mi paradero, porque estaba jugando torneos, no estaba escondido".
Y continuó: No es que me fui a una playa y me escondí para que no me vean. Estaba trabajando”, enfatizó. Cabrera comentó además sobre un video que filmó la denunciante en 2016 en el que se lo ve increpándola, lo siguiente: “No sé realmente que es lo que se ve. Todos cometemos errores y me pasó a mi también. Ya veremos la forma de revertir la situación. Estoy muy seguro de todo y creo que con la verdad voy a salir bien".
El propio golfista dijo no saber la fecha fehaciente para su traslado a Córdoba, aunque sería este sábado. "Me pueden acusar de lo que quieran. Pueden decir lo que quieran, pero después hay que demostrarlo. Confío en la justicia, en mi abogado y en mí. Sé que con la verdad voy a salir adelante”, concluyó. Cuando llegue a Córdoba, Cabrera será alojado en la dependencia carcelaria de Bouwer, donde esperará la fecha del proceso de enjuiciamiento a cargo de la Cámara Segunda del Crimen.
El golfista argentino estuvo detenido en una dependencia federal de Río de Janeiro, donde fue ubicado por Interpol luego de la emisión de una alerta roja para su captura internacional, hace cinco meses. El deportista, de 51 años, ganador del US Open 2007 y del Masters de Augusta en 2009, viajó el 20 de julio de 2020, sin autorización judicial, desde su domicilio en Villa Allende hacia Estados Unidos, para participar de un torneo de golf.
La Justicia advirtió su ausencia dos semanas después, a poco de establecer la fecha para el juicio que debe enfrentar y también a días de nuevas denuncias presentadas por su ex pareja, lo que motivó que la Justicia local tramitara la captura internacional.