Un hombre, empleado del sindicato de panaderos, fue acribillado de siete balazos por hombres que llevaban máscaras de payaso, en la localidad bonaerense de Villa Martelli, partido de Vicente López, en lo que se presume fue una venganza o un ataque organizado.
Para cometer el crimen, los payasos primero chocaron con un auto la moto en la que se trasladaba. Una vez que lo hicieron caer, le dispararon. La escena parece de película y ocurrió ayer cerca de las 22.30.
Ibañez trabajaba como empleado del sindicato de panaderos.
La víctima fue identificada como Omar Ibánez, empleado del sindicato de Panaderos. El ataque a tiros se cometió en el cruce de las calles Güemes y Habana,y fue chocado por un auto tripulado por al menos dos hombres.
Cuando a raíz del impacto Ibáñez cayó al asfalto, dos hombres con máscaras de payaso se aproximaron y lo acribillaron de siete balazos, tras lo cual escaparon.
Ibáñez (41), empleado del Sindicato de Panaderos, se trasladaba en una moto Honda Tornado por el cruce de las calles Martín Güemes y Habana, a una cuadra de la denominada Villa Melo, y fue chocado por un auto de color rojo tripulado por al menos dos hombres.
El automóvil -luego identificado gracias a cámaras de seguridad como un Renault Clio-, arrastró a lo largo de 20 metros a la víctima y a su moto por la calle.
La escena donde se produjo el crimen del panadero.
"No podemos descartar ninguna hipótesis pero llama poderosamente la atención la forma en la que sucedió el hecho y la gran la cantidad de disparos que le efectuaron a la víctima, tres de ellos directamente en la cabeza", dijo la fiscal a cargo de la investigación, Marcela Semería, de la Unidad Funcional de Instrucción (UFI) Vicente López Oeste.
Claudia, la dueña de la casa frente a la que ocurrió el hecho, contó hoy al canal C5N que en total “se escucharon como siete u ocho disparos” y que cuando salieron a ver qué pasaba “el muchacho estaba tirado en el piso”.
“El comentario que hacía la gente es que habían visto un coche rojo del que bajaron dos personas con máscaras de payasos. Antes chocaron a la moto para pararla y el hombre cayó en la vereda. Primero bajó uno, le pegó no sé cuantos tiros, y después como vieron que el pibe se movió, se bajó el otro y lo remató”, contó Claudia.
"Fue a una cuadra de la villa Melo. Es una zona difícil para conseguir testigos que se animen a hablar. Lo que tenemos es por los dichos de gente que habló poco con los primeros policías que llegaron al lugar, pero se retiraron rápidamente", explicó la fiscal.
Las fuentes revelaron que Ibáñez era "empleado" en el Sindicato de Panaderos, que vivía del lado de la villa Loyola, en el partido de San Martín, que estaba separado y que por el momento no le surgieron antecedentes ni detenciones previas.