por Gisela Nicosia
22 Marzo de 2017 07:48En el barrio de La Boca, por las noches se comparte la vereda. La mayoría de los vecinos se conocen, por lo menos de vista. Al terminar el día muchos salen con la pava y el mate, otros sólo a fumar un cigarrillo. Claudia Ovejero y Susana conversaban cuando fueron sorprendidas por un tiroteo.
“Eran las diez y media. A esa hora la gente está en la calle en La Boca. No es la primera vez que pasa que vienen a tirotearse acá. Pero no salimos aún del asombro por lo que vivimos anoche. Tiraban directamente a las casas, donde viven familias”, dijo Luciano Álvarez a BigBang, vocero de la cooperativa de viviendas “Los Pibes”.
El lugar donde ocurrió el tiroteo.
Lo primero que vieron en el barrio fue un auto de alta gama a gran velocidad. Era perseguido por un patrullero de la Policía Bonaerense. A los tiros, los agentes intentaban detener a los ocupantes del vehículo.
Los vecinos comenzaron a gritar, mientras otros se refugiaron donde pudieron. Los fogonazos de las balas no se detenían pese a los ruegos. Una bala impactó en el ojo izquierdo de Claudia. Susana fue herida en una de sus piernas. Ambas fueron trasladadas de urgencia al hospital Argerich. Claudia falleció horas después. Susana, que está embarazada, está fuera de peligro y permanece internada en observación.
Las heridas de Susana.
“Durante cuarenta minutos la Policía continuó disparando contra las casas. Las mujeres se desangraban y ellos no se detenían”, explicó Álvarez, quien se encontraba en la cooperativa, ubicada en Lamadrid y Ministro Brin. En esa misma esquina las balas pasaban sin cesar.
Los vecinos denuncian a la Policía.
Según denunciaron los vecinos, la Policía Bonaerense perseguía a un grupo de delincuentes y abrió fuego. De inmediato, los testigos del hecho salieron a repudiar el ataque pero sus quejas, según aseguran los vecinos, empeoraron las cosas.
Luego de la manifestación, denunciaron que personal de la Policía de la Ciudad se dirigió a la esquina de Pedro de Mendoza y Lamadrid y avanzó sobre los vecinos disparando balas de goma e hiriendo a varios.
Los cartuchos recolectados por los vecinos.
Desde FM Riachuelo, la radio de los vecinos de la cooperativa de viviendas, aseguraron que las fuerzas de seguridad dispararon no sólo balas de goma sino que también de plomo.
PARTE POLICIAL
Según el parte policial, el episodio se trato de una persecución. La Policía seguía al menos dos ladrones que iban a bordo de una Fiat 500 por Lanús. La versión policial es la siguiente:
El vehículo tenía un pedido de secuestro y pese a la insistencia de los agentes pidiendo que se que detengan, no acataron la orden. Se inició una persecución, cerca de la cancha de Lanús y terminó en La Boca. En el camino, se informó a la Policía de la Ciudad el pedido de apoyo. Los sospechosos cruzaron por el Puente Nicolás Avellaneda y terminaron en el barrio de La Boca.
Desde el vehículo, los sospechosos dispararon al móvil de la Bonaerense y cuando llegan a Pedro de Mendoza y A. de Lamadrid, chocaron contra el móvil policial produciéndose un intercambio de disparos. Allí ven que en el vehículo iba como conductor una persona del sexo masculino, como acompañante una mujer y en la parte trasera al parecer otra persona.
Luego del enfrentamiento, el auto continúa su fuga por calle Lamadrid, vuelve a chocar contra unos pilotes en la intersección de Lamadrid y Necochea. Los delincuentes se fugan a pie y horas más tarde, uno de ellos es detenido.
Mientras tanto, en la calle Ministro Brin al 1300 un móvil de la Policia fue interceptado por vecinos del lugar. En ese momento aparecen diversos vecinos, quienes comienzan a agredir a los integrantes del móvil, quienes atinan en un principio a retirarse del lugar, pero dado la cantidad de vecinos, alrededor de 70, queda el móvil en la esquina de Ministro Brin y Lamadrid, rodeado de vecinos que dañaron la unidad.
Por otra parte, otro móvil acude al lugar donde quedo el vehículo y logra retirarlo del lugar y ante la agresividad de la gente que arroja piedras contra los móviles y la policía dispara "munición antitumulto" para dispersar a los atacantes.
Esa es, por supuesto, la versión policial de los hechos. La de los vecinos es bien distinta. Pero hay dos datos irrefutables: una mujer muerta, una mujer embarazada herida de bala. Y en ambos casos, los autores de los disparos fueron policías.