Sandro Leiva y Olivia Márquez fueron hallados muertos, enterrados en una zona boscosa de Misiones. Llevaban cinco días desaparecidos. La policía cree que los mataron por haber sido testigos de un crimen cometido por un suboficial de la Policía que asesinó a su padre.
La pareja comenzó a ser buscada hace cinco días y hoy apareció enterrada.
El policía está prófugo y continua siendo buscado por los oficiales de Oberá. Los cuerpos de la pareja fueron encontrados en un arroyo a 200 metros de su vivienda.
Por su parte, Hildo Victorino Dlugokinski, padre del policía prófugo, fue asesinado el 25 de marzo en su casa. Leiva y Márquez solían hacer tareas agrícolas para él.
La pareja fue encontrada en un arroyo.
Según Clarín, los investigadores dedujeron que el cabo habría actuado al menos junto a dos cómplices, ya que el oficial Leiva era un hombre fuerte, difícil de derribar. El cuñado ya está detenido y el hermano de éste continúa prófugo.
Por eso caso, está detenido un hombre que se cree actuó como complice del policía.
La búsqueda de la pareja comenzó el jueves pasado, cuando un familiar denunció su desaparición. A partir de allí, la gendarmería comenzó el trabajo de campo, y así fue que encontraron al suboficial mientras manejaba un vehículo que llevaba en su baúl la moto de las víctimas. Como el vehículo no tenía pedido de secuestro, el hombre explicó que la llevaba para reparar, y continuó viaje.
Finalmente, se estableció que el cabo cruzó la frontera hacia Brasil en un micro, posiblemente, hacia Santa Rosa, donde reside su madre.