Por aire, tierra y agua. Así buscan a los fugados. El megaoperativo se trasladó a Laguna Paiva, a 45 kilómetros de Santa Fe. Cada minuto es valioso para encontrarlos. Pasaron 24 horas desde que Víctor Schillaci y los hermanos Cristian y Martín Lanatta abrieron fuego contra Gendarmería y su búsqueda se convirtió en una misión implacable.
“El dato de Laguna Paiva llegó a Gendarmería, alguien dijo que los vio por ahí. Estamos rastreando todas las posibildiades”, dijo una fuente judicial.
Una imagen de Laguna Paiva.
Víctor Schillaci y los hermanos Cristian y Martín Lanatta estarían sin vehículo.
Las fuerzas de seguridad conducen el megaoperativo con todas las herramientas posibles para rastrillar distintas localidades de Santa Fe. En nuevos allanamientos para intentar dar los prófugos se sumó la pesquisa la zona de Coronda, donde buscan en un laberinto de plantación de soja y maíz.
El rastrillaje continuó durante toda la noche en jurisdicción de San Agustín, ubicado a 25 kilómetros al oeste de la capital provincial. En este caso, no sólo se realizó con los más de 600 efectivos de tres fuerzas conjuntas, es decir Gendarmería, policía santafecina y Policía de Seguridad Aeroportuaria, sino que también se sumaron perros adiestrados y rastreo aéreo con helicópteros.
La policía revisa baúles y autos en la zona.
Asimismo, en las rutas y calles de distintas ciudades santafecinas hay operativos que revisan autos y casas.
La base del operativo fue desplegada en el kilómetro 18 de la autovía Santa Fe-San Francisco, en el acceso a San Agustín. En un predio que incluye una estación de servicio, se ubicó el camión de comunicaciones de Gendarmería y desde allí operan los jefes del dispositivo.
El megaoperativo se intensificó en las últimas horas.
"San Agustín ha modificado su vida normal por esta situación. Hay temor por la presencia de los fugados. Se sospecha que siguen en la zona pero no hay ninguna certeza", reconoció a los medios esta mañana Emiliano Modaca, presidente comunal de esa localidad.
Se sumaron perros a la búsqueda de los fugados.
Entre las hipótesis que manejarían los investigadores, se cree que los prófugos no habrían podido conseguir otro vehículo y podrían estar en alguna tapera o escondidos en algunos maizales que superan una altura de un metro y medio.
"San Agustín ha modificado su vida normal por esta situación. Hay temor por la presencia de los fugados. Se sospecha que siguen en la zona pero no hay ninguna certeza
El hermetismo de las Fuerzas Federales es total e incluso trascendió que se le ha sugerido a los presidentes comunales e intendentes de las localidades que no hagan declaraciones porque podrían ser escuchadas por los prófugos.