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"Put... de mierd... te vamos a matar": denuncian otro ataque homofóbico en la salida de Mandarine

La víctima relató cómo fue la brutal golpiza y el indignante accionar de los patovicas del complejo ubicado sobre la Costanera.

01 Febrero de 2022 11:21
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Un joven denunció haber sido víctima de una golpiza en el boliche porteño Mandarine durante una fiesta de música electrónica. Según su denuncia, los patovicas de la disco lo echaron y permitieron que dos hombres lo golpearan en lo que fue considerada por la víctima como un ataque homofóbico debido a su condición sexual. 

La víctima, Daniel Callejas, contó en sus redes sociales cómo fue el episodio. “Habló con miedo, pero hablo; porque muchas personas de mi comunidad por actos homofóbicos y de violencia no están entre nosotros. Y por eso siento la responsabilidad de no quedarme callado”, arrancó.

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Luego, relató que en el medio de una fiesta (Rio, que se realiza todos los domingos en el mencionado complejo) dos patovicas sin mediar palabra lo echaron del vip en donde estaba por las quejas de otros clientes que se quejaban por su forma de bailar. Utilizando la violencia y sin dejarle tomar sus pertenencias, siempre de acuerdo al relato de la víctima, lo echaron del predio. Ya afuera, Callejas les reclamó que lo dejaran entrar o comunicarse con alguien para recuperar sus llaves, dinero y celular; pero su pedido no fue atendido.

“Me agarraron de las muñecas y me sacaron violentamente”, relató. “No me hicieron caso, me trataron de loco, le pedí de mil maneras que me dejen entrar por mis documentos”, agregó la víctima. En ese momento, Callejas empezó a ver cómo algunas personas se le acercaban con comentarios contra su sexualidad y amenazas. 

“Llegan dos chicos más que me empiezan a decir: 'Put... de mierda, te vamos a matar'. Yo pensé que iba a matarme, porque me empezaron a pegar tan fuerte en la cara que quede inconsciente”, contó en su descargo la víctima que no puede saber a ciencia cierta cuánto tiempo le pegaron o qué hicieron con él después de su desmayo.

Una vez que se despertó, se encontró entre los autos que estaban afuera del predio, con la cabeza ensangrentada y sin tener noción de que había sucedido. “Caminé unos metros hasta donde estaban estas personas de seguridad, les pedí ayuda, asistencia médica porque están obligados a tener un médico allí. No me ofrecieron asistencia, ni llamaron a la ambulancia. Me ignoraron y me trataron de loco”, remarcó Callejas.

Ante la negativa de los patovicas de ayudarlo con la cabeza ensangrentada fue una chica que salía del lugar la que lo ayudó. Ella volvió a ingresar, contactó a una amiga de la víctima que salió para llevarlo a un hospital. “Necesito que se tomen las medidas correspondientes no sólo con este ataque. Porque la violencia que vivimos las personas de la colectividad LGTBIQ es sistémica, está en todos lados. No es la primera vez que me pasa”, contó.

“No me quiero quedar callado. Es una posibilidad constante de peligro en cualquier lugar en el que te encontrés. Basta de violencia, basta de homofobia”, concluyó.

Hace poco más de un mes un joven también denunció una golpiza en Mandarine. Se trató de David, su apellido nunca trascendió, quien relató que alrededor de las 4 de la mañana, "por la acumulación de gente que había", el joven sintió que comenzaba a faltarle el aire y le pidió a sus amigos que lo acompañaran al baño, "que se encontraba en la parte de atrás de la zona VIP del lugar". 

Sus compañeros, luego de ver que se encontraba mejor y asistirlo con una botella de agua, volvieron al sector del escenario, donde tocaba el DJ. "Yo les dije que iba al baño y después regresaba" pero "al salir del baño comenzó la peor noche de mi vida", lamentó. 

Fue entonces que "una persona de seguridad del evento me dijo que me tenía que ir. Yo me rehúso y le pregunto por qué y automáticamente se acercan cuatro hombres más de seguridad y estos animales comenzaron a prepotearme y a empujarme", recordó.

"Con el cinto me ataron los pies y con precintos me ataron ambos manos. Sin poder defenderme, me empezaron a golpear en el piso hasta dejarme casi inconciente", detalló el joven, quien acompañó su relato con un video en el que mostró su rostro lastimado, consecuencia de la golpiza. 

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“Hago este video para que vean cómo me dejaron estos animales. La verdad, me duele todo, tengo golpes en todo el cuerpo. Seguramente esto le pasó a más personas. Ayudenmé a que esto se haga viral y que no pase de nuevo", solicitó.

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