La segunda semana del juicio a los ocho acusados de matar a golpes a Fernando Báez Sosa en la madrugada del 18 de enero de 2020 concluirá este viernes con las declaraciones testimoniales de dos bomberos voluntarios de Villa Gesell, quienes asistieron a la víctima tras el brutal ataque sufrido frente al boliche "Le Brique", y de un joven oriundo de Zárate que denunció a uno de los rugbiers semanas antes del hecho por una presunta agresión.
Fuentes judiciales indicaron que esos serán los únicos testigos de la décima jornada de audiencias ante el Tribunal Oral en lo Criminal 1 de Dolores, ya que otros pautados inicialmente para el mismo día fueron desistidos tanto por los fiscales Juan Manuel Dávila y Gustavo García, como por los abogados de la familia de la víctima, Fernando Burlando y Fabián Améndola.
Tras la audiencia del jueves, marcada por la sorpresiva declaración de Luciano Pertossi (21), el primer imputado que rompe el silencio desde el inicio del juicio, este viernes declararán solo esos tres testigos. Dos de ellos, Verónica Onieva y Javier Timoteo, son miembros del cuerpo de Bomberos Voluntarios de Gesell, que asistieron a Báez Sosa minutos después de ser atacado frente al local bailable ubicado sobre Avenida 3.
Si bien ambos testimonios estaban previstos para la última semana del juicio, finalmente fueron reprogramados para las 9, en el primer piso de los tribunales. Luego será el turno de Pablo Gastón Zapata, un joven de Zárate que semanas antes del crimen de Fernando había denunciado a uno de los imputados por una presunta agresión en esa localidad del norte bonaerense.
También sostuvo que uno de ellos, Lucas Pertossi, le robó la moto. Su presencia, sin embargo, no está cien por ciento confirmada. Así lo manifestaron fuentes con acceso al expediente a este medio. Zapata había declarado en varios medios que lo habían atacado como a Fernando, el 10 y el 15 de diciembre de 2019. "Fue similar a la de Villa Gesell en enero de 2020", había sido su afirmación sobre la dinámica de la agresión sufrida a manos de Lucas Pertossi. “La primera vez nos atacaron a piedrazos entre doce. Hicieron ese cercado que te hacen ellos para que nadie se escape. Pensé que me mataban. Hasta el día de hoy siento puntadas en la cabeza”, había contado en Canal 9.
Su testimonio no es diferente en cuanto al modus operandi al que dio este jueves Francisco Santoro, amigo del remero Pablo Ventura -falsamente acusado por los imputados-, cuando declaró en el juicio por el crimen de Báez Sosa. Detalló episodios violentos de los acusados en Zárate. “Te genera ira su impunidad”, dijo. “En una previa, uno de ellos lo provocó a uno de mis amigos. La forma en que te provocan o buscan tu reacción es con empujones, a propósito. Un toque en la cabeza o un vaso derramado. Te ponían a prueba a ver tu reacción. Te quedabas callado y te alejabas o reaccionabas mal”, describió sobre un caso del que fue testigo.
Uno por uno: cuáles son las pruebas en contra de los ocho rugbiers acusados de matar a Fernando Báez Sosa
De acuerdo con Santoro, en una fiesta en El Pineral, en enero de 2019. Lucas Pertossi comenzó una pelea que terminó con un chico muy malherido. "No era humano ver lo que estaba pasando. Es el que siempre te pone a prueba con empujones, con goles, con lo que sea”, agregó el testigo y destacó que el rugbier era "muy agresivo". "Para que te des una idea: el chico termino hospitalizado con fractura de cadera”, señaló Santoro.
Está previsto que los padres de Fernando presencien las declaraciones en la sala de audiencias del primer piso de los tribunales, como ocurrió durante las jornadas anteriores. Los ocho imputados -Máximo Thomsen (23), Enzo Comelli (22), Matías Benicelli (23), Blas Cinalli (21), Ayrton Viollaz (23), y Luciano, Ciro (22) y Lucas Pertossi (23)- también estarán presentes, al igual que desde la apertura del debate oral.