25 Diciembre de 2024 18:46
La madrugada previa a Nochebuena se tiñó de luto en la ruta. Un fatal accidente en la intersección de las rutas 33 y 70, cerca de General Villegas, se cobró la vida de Anabel Lucila Grossi y Esteban Ismael Pereyra, una pareja que había forjado su vida en Neuquén y se dirigía a Santa Fe para celebrar la Navidad con la familia de ella. El trayecto que debía unirlos con sus seres queridos terminó en una tragedia que conmocionó a dos provincias. Esteban, de 36 años, falleció en el lugar del impacto, mientras que Anabel, de 31 años, fue trasladada en estado crítico al Hospital Municipal de Rivadavia, donde finalmente perdió la vida.
El vehículo en el que viajaban, un Citroën Cactus, colisionó contra el semirremolque de un camión cisterna en un cruce vial conocido por su peligrosidad, agravada por la falta de infraestructura adecuada. Anabel Lucila Grossi, conocida cariñosamente como "Anita" por sus colegas y pacientes, era una médica pediatra comprometida con su vocación. Había llegado a Neuquén desde su natal Roldán, Santa Fe, para completar su formación en neonatología, un área que describía como su pasión. Trabajaba en el Hospital Heller y realizaba rotaciones en el Hospital Castro Rendón, donde era reconocida por su energía, compromiso y calidez.
Sus compañeros la recuerdan como una profesional que iluminaba el ambiente con su sonrisa y un amor inquebrantable por su trabajo. Desde el Hospital Provincial de Neuquén, donde Anita completó su residencia, la despidieron con un emotivo mensaje: "Llegaste a nuestro servicio para hacer realidad tu sueño de ser neonatóloga. Con compromiso y amor llenaste con tu frescura nuestra realidad. Sos una hermosa persona; tu luz brillará siempre entre nosotros". El ministro de Salud de Neuquén, Martín Regueiro, también expresó sus condolencias: "Acompañamos en este momento de profundo dolor a sus seres queridos y al equipo de trabajo del hospital".
El lugar del accidente, donde la Ruta Nacional 33 y la Ruta Provincial 70 se cruzan, es un punto crítico de tránsito que carece de una rotonda. La ausencia de medidas de seguridad en la intersección ha sido objeto de reclamos por parte de los usuarios durante años. Este hecho reavivó el debate sobre la necesidad de inversiones en infraestructura vial para evitar tragedias similares. Según vecinos de la zona, los accidentes en ese cruce son frecuentes, pero las soluciones nunca llegan. El fallecimiento de Anabel y Esteban no solo deja un vacío en sus familias, sino que también sacude a la comunidad neuquina, que despidió con mucho dolor a la joven pareja.