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Una defensa paga

"Rezo por Fernando": las irregularidades y mentiras en la entrevista a Máximo Thomsen

El condenado a prisión perpetua por el crimen de Fernando Báez Sosa rompió el silencio.

29 Mayo de 2024 10:18
Máximo Thomsen

Fernando Báez Sosa tenía 18 años. Estaba disfrutando de sus vacaciones junto a sus amigos del secundario y su novia cuando el 18 de enero de 2020 recibió una brutal paliza a la salida del boliche Le Brique de Villa Gesell que le costó la vida. Por este hecho, los jueces del Tribunal Oral en lo Criminal Número 1 de Dolores, María Claudia Castro, Emiliano Lázzari y Christian Rabaia condenaron por "homicidio doblemente agravado por el concurso premeditado de dos o más personas y por alevosía en concurso real con ideal con lesiones leves" a Máximo Thomsen, Ciro Pertossi, Luciano Pertossi, Enzo Comelli y Matías Benicelli, todos ellos a prisión perpetua. 

Además, Ayrton Viollaz, Blas Cinalli y Lucas Pertossi recibieron una pena de quince años de prisión efectiva por ser hallados como partícipes secundarios del asesinato de Fernando Báez Sosa. Esto ocurrió el día 6 de febrero de 2023, pero a más de un año de aquello uno de los condenados rompió el silencio: se trató de Thomsen, considerado como el líder del grupo, el más destacado deportivamente y que se desempeñaba desde 2017 en el Club Atlético de San Isidro. 

De hecho, en 2016, diarios de la zona local de Zárate había llegado a tildar a Máximo como un "futuro Puma". Hoy, un asesino. Máximo Thomsen fue señalado como quien le propinó a Fernando golpes de puño y patadas en la cabeza, por lo menos dos, cuando este estaba ya tirado en el suelo. También fue señalado como el líder de facto debido a que se ve filmado golpeando y huyendo de la escena del crimen, erráticamente, según declararon los testigos en el juicio. 

El informe del estudio escopométrico reveló que la impronta de una zapatilla en la cara de la víctima la dejó Thomsen, confirmando que la sangre era la de Fernando. Esta fue encontrada en la casa por agentes policiales tras el allanamiento ocurrido al día siguiente en la casa que el grupo alquilaba en la costa. Posteriormente se encontraría sangre en su camisa y en la propia mano derecha del joven que hoy tiene 24 años.

En diálogo con Telenoche, el condenado aseguró anoche que "nunca" pensó que podía "matar a una persona usando el cuerpo y las manos" y pidió que no le imputen a él "lo que hicieron otros", en referencia a su compañeros. Desde la cárcel, rompió el silencio y además de llorar en cámara, dijo que reza "todos los días" por el joven estudiante de derecho al que mataron. "Es algo que quiero contar hace cuatro años, no necesito mucha preparación para hacerlo", indicó.

La entrevista duró alrededor de 20 minutos

Durante la breve entrevista, la cual duró cerca de 20 minutos, Máximo sostuvo que el grupo de amigos era "ocasional" y que solo se juntaban para irse de vacaciones. También admitió que "tomaba mucho alcohol" porque era su "manera" de divertirse. "Para divertirme tenía que salir y tomar alcohol para poder soltarme", afirmó el joven condenado a prisión perpetua por el crimen, aunque aclaró que no se drogaba. 

Sobre la noche del asesinato, recordó: "Era la segunda noche desde que llegamos. Era la primera noche que salimos. Yo llegué borracho al boliche. Lo que me acuerdo es que yo estaba agarrado de la barra, de espalda a la pista, y siento que alguien se me había caído encima. Era Matías (Benicelli) que me dicen que le habían pegado y nos sacan a los dos. Yo no sabía, pero era Fernando Báez Sosa el que le pegó a Matías una piña en la frente".

Al mismo tiempo, manifestó que él "nunca" se peleó dentro de un boliche. "Nunca tuve contacto visual con Fernando. Cuando me sacan, siento que me estaban asfixiando. Afuera mis amigos se vuelven a pelear y cuando  terminan cruzamos. De frente vemos alguien que nos hacía burla y era Fernando", dijo y explicó que salió corriendo con sus amigos porque formaba parte del grupo.

Ante la consulta sobre quién le pega primero a Fernando, dijo que "fue Enzo" (Comelli) y luego reconoció: "Yo también le pegué. Recuerdo que entré a tirar patadas. Por mi cabeza pasaba que me estaba metiendo en una pelea. Yo no le pegué una patada en la cabeza a Fernando, fue Ciro (Pertossi), pero no llego a pegarle". "No estábamos festejando, nadie se representó el resultado de la pelea", advirtió sobre el video donde se los ve abrazarse.

Máximo Thomsen rompió el silencio

Si bien dijo que no recuerda haberle pegado en la cabeza a Fernando, sí reconoció que la suela que quedó marcada en la cara de la víctima era de su zapatilla. "Nunca quise que terminara así. Yo estuve ahí, le pegué. Es difícil, porque es un cargo de conciencia importante. Cuando uno no lo busca. Fue culpa de nosotros, también culpa mía. Nadie lo quiso así, ni yo, ni mis amigos. Podemos ser buenas o malas personas, pero ninguno quiso que terminara así. Nadie es quién para quitarle la vida a una persona. Jamás se me cruzó por la cabeza que lo habíamos matado", dijo entre lágrimas y esperando que la Justicia le otorguen menos años a su condena que es perpetua.

Thomsen sostuvo que se enteró al día siguiente de la muerte y señaló: "Yo entré en conciencia de lo que había pasado cuando dormí la primera noche en la comisaría. Ahí me di cuenta de la pesadilla que estaba viviendo". El joven rugbier remarcó que el abogado anterior que tenía, Hugo Tomei, le había dicho que "no hablara porque iba a ser contraproducente y se iba a usar" en su "contra". Justamente a raíz de los desacuerdos en cómo llevó la causa, Thomsen decidió cambiar de letrado y ahora lo defiende Francisco Oneto, ex candidato a vicegobernador bonaerense por La Libertad Avanza (LLA), y quien elaboro esta estrategia para limpiar la imagen del ex rugbier. 

Las irregularidades y mentiras en la entrevista a Thomsen

Tras la entrevista, el periodista Rolando Barbano señaló que "durante el juicio no le dieron ninguna explicación a los padres (de Fernando)". Eso se trató de un error, ya que Thomsen, a quien entrevistó, declaró en el juicio y dio su "explicación". También llama la atención que cuando el condenado le señaló al cronista que "la violencia no tiene nada que ver con el rugby, es una cuestión social. Uno sale a la calle y hay violencia. Y la violencia siempre trae más violencia", no haya habido una repregunta.

Más tarde, el propio Barbano volvió a cometer una suerte de furcio: "¿En esa época, cuando salías los fines de semana, porque cuando ocurrió el crimen de Fernando se dijo que vos y algunos de los otros acusados solían salir en Zárate y agarrarse a piñas todos los fines de semana?". Acusados no, condenados. "Salías al boliche y era muy normal... dos o tres peleas había seguro. Con baldozas, botellas, cuchillos, armas... era una cuestión difícil", señaló Thomsen. 

Juicio Fernando Báez Sosa

Pero lo cierto es que el condenado la dibujó y no respondió la pregunta que decía: "¿En alguna de esas peleas se te cruzó que podías matar a alguien?". "Uno cree que necesita algo para terminar con la vida de alguien, no siente que con el cuerpo puede llegar a ciertos extremos. No es algo que tuve presente en algún momento", fue la siguiente frase que lanzó Thomsen, mientras que la transmisión mostraba una foto del grupo condenado. Tampoco hubo una repregunta. "En los audios hablás de la organización (del viaje a Gesell) de la compra de alcohol, ¿por qué llevaron tanto alcohol y cuál era la idea?", prefirió consultarle Barbano.

Lo curioso es que a lo largo de la causa, nunca se les hizo test de alcoholemia a los implicados y resultó ser la base de la defensa de Tomei. Algo que tampoco se mencionó en la nota. Si bien el periodista de El Trece  sostuvo en la venta de la nota que no se había explicado en el juicio "¿cómo fue el día del crimen, la previa?", lo curioso es que a esta pregunta Máximo respondió lo mismo que declaró en el juicio. Thomsen insiste en que habían empezado a tomar la noche del crimen a las dos de la tarde. "Llevamos una caja de Fernet y cuatro botellas de Smirnoff, con hielo", dijo en la nota. Exactamente su misma declaración en la audiencia. 

Fernando Báez Sosa fue asesinado en febrero de 2020

Durante al entrevista, Barbano -que sostuvo que nadie pagó por la nota- pregunta: "¿Seis botellas de Fernet y cuatro de vodka?", y suma: "Ustedes eran diez. ¿Tomaron mucho en la playa?". Lo llamativo es que esto va en línea con la defensa histórica de Thomsen. "Tipo tres habíamos llegado a la playa y recuerdo que tipo siete decidimos cortar ahí porque teníamos que comprar las entradas", dice Máximo. El periodista, insiste: "¿Ya estaban borrachos a esa hora?", a lo que Thomsen afirma: "Sí, sí". Durante el juicio, el abogado defensor siempre insistió en el tema alcohol; algo que ni el Tribunal, ni la fiscalía, ni la querella abordó. 

Además, no les hicieron los exámenes toxicológicos. ¿Suena a defensa? "¿Vos llegaste borracho a Le Brique?", fue la pregunta, que sustenta la defensa. "¿Qué pasó para que apareciera la gente de seguridad del boliche y fuera sobre tu grupo y el grupo de Fernando Báez Sosa?", aborda Barbano. "Estaba agarrado de la barra, de espaldas a la pista, y siento que no era un choque, sino que alguien se me habia caído encima. Era Matías (Benicelli)", responde el ex rugbier. Justamente, se trata del otro condenado que cambió de abogado. "Se estaba agarrando la cara. Le pregunto qué pasó y me dice: 'Me pegaron'...", añadió Thomsen. 

Una vez más, sorprende que desde canal Trece no hayan indagado más al respecto sobre lo que ocurrió aquella noche en el boliche, ya que durante el juicio Thomsen dio otra versión sobre la pelea dentro de Le Brique. Según Máximo, cuando la seguridad del boliche intervino en la pelea le dijo: "Por favor bajalo, porque lo vas a matar". ¿Qué declararon en la IPP y en el juicio los de seguridad? Que la frase fue: "A él no lo sacás". Thomsen dice que Fernando le pegó una piña en la frente a Benicelli por sentirse amenazado. En el juicio se declaró otra cosa, pero el periodista optó por dejar pasar el hecho de que se busque dejar a la víctima como un "pendenciero". 

Juicio Fernando Báez Sosa

Segundos después de eso, el periodista le dice al acusado: "Lo que describís no se condice con lo que la gente conoce de Fernando". ¿LA respuesta? Otra contradicción: "No, pero a mí me pusieron como que participé dentro del boliche y nunca participé". En el juicio declaró otra cosa. "Cuando salgo del boliche, me quedo insultando a los patovicas porque me sacaron y hay otra pelea", le cuenta Máximo a Baldano, a lo que el cornista le pregunta: "¿Esa pelea previa al crimen de Fernando es la que filma Lucas Pertossi?". La respuesta fue un tímido "Sí, sí" que corresponde a otra mentira: la pelea de Luciano Pertossi fue una de las más difíciles de establecer en el juicio. 

La disputa que filma Lucas es el inicio del ataque a Fernando. Sentado y con lágrimas en sus ojos, Thomsen dijo que se quería ir, pero que vio que alguien le estaba haciendo burlas a sus amigos por haberles pegado. "¿Quién es el que hace eso?", indaga el periodista. "Después me enteré de que había sido Fernando", contesta él. "Pero en el juicio no hay testigos que hayan declarado eso", señala Barbano en su primera repregunta. "No, pero se dijeron muchas cosas y en el juicio después se dijeron otras", aclara Máximo, quien acto seguido destaca que la primera piña a Fernando se la da "Enzo". Otra falacia, ya que en el juicio se certificó que fue Comelli.

Un dato no menor es que Enzo Comelli sigue siendo representado por Tomei, a diferencia de Thomsen y Benicelli. "Desde el primer día quise contar todo, pero a mí no me dieron nunca la posibilidad", manifestó Thomsen durante al entrevista. Acá hay que destacar que el condenado tuvo la IPP, el juicio y Casación para hacerlo. Declaró en el juicio, pero ahora cambia su versión y se encolumna con Benicelli. "Hay un video en el que se ve que alguien patea en el piso a Fernando en la cabeza, ¿fuiste vos?", fue una de las últimas preguntas del periodista. "No, yo no fui", responde Thomsen. "¿Quién fue?", le consulta. "Fue Ciro (Pertossi), pero se comprobó que no se llega a da", contesta.

Máximo Thomsen busca reducir la sentencia

En ese momento, Máximo resalta: "Pero siempre dijeron que esa persona fui yo y no se da, yo no era", frente al silencio de su interlocutor. "Se ve que festejan después de la pelea", fue la siguiente pregunta de Barbano y otra mentira de Thomsen: "No, yo personalmente me fui serio porque habíamos estado veinte minutos en el boliche". Vale destacar que en la causa consta que entraron a la una y salieron a las cuatro de la madrugada. "En el juicio los peritos dijeron que en la cara de Fernando estaba la huella de tu zapatilla, ¿qué explicación tenés?", fue otra de las consultas del periodista. 

Se trata de un dato del expediente, que tiene una imagen que lo grafica y una pericia que lo certifica. "Sólo recuerdo que entré pateando, sí cuando vi en el juicio dije es mía (sigue). Como te dije, no me quiero esconder de lo que pasó, pero si somos culpables de algo quiero que nos culpen por lo que pasó, no por algo que dicen que pasó...", destaca el entrevistado antes de ponerse a llorar y sigue: "Cargar con esto... ni yo, ni mis amigos...", los mismos que al inicio de la nota dijo que sólo los tenía para irse de vacaciones. "Cuando vos te vas del lugar, ¿pensaste que habían matado a Fernando?", le pregunta y Máximo sigue: "No, no; jamás se me hubiese ocurrido por la cabeza".

Sin embargo, entre ellos se mandaron un audio donde señalan que su víctima "caducó" tras la pelea. Durante al entrevista, Máximo contó que se enteró de la muerte de Fernando al día siguiente, tras el allanamiento. "En mi cabeza empecé a entrar en consciencia cuando me dormí en la comisaría esa noche", sigue, pero en ningún momento se hace mención en las razones que lo llevaron a inculpar a Pablo Ventura por el crimen. "No me siento asesino. Pensar que te están comparando con gente que mata por matar que después lo ves acá adentro (en cárcel) y lo cuenta y después los largan a los dos o tres años...", fue el reclamo que hizo el condenado. 

Rolando Barbano en la presentación de su entrevista a Máximo Thomsen en Telenoche.

Y acá, otra irregularidad en la entrevista: ninguno de los condenados por el caso de Fernando Báez Sosa tuvo contacto con otros presos por fuera de la vez que tuvieron que cortar el pasto y un interno los agredió verbalmente, los grabó y fue sancionado. "Máximo Thomsen no tiene ningún código tumbero", resaltó Barbano tras la entrevista, sin aclarar que el joven ex rugbier todavía sigue detenido en la alcaldía. "Thomsen habla como si fuera un joven que tuviera una vida normal, no es tumbero", concluye el cronista de forma clasista. Según pudo saber BigBang, la nota a Máximo Thomsen salió alrededor de unos 10.000 dólares.