04 Agosto de 2016 19:08
En lo que puede llegar a leerse como un contundente respaldo tras los cuestionamientos que sufrió de parte de Elisa Carrió, el ministro de Seguridad bonaerense, Cristian Ritondo, encabezó hoy un “timbreo” en el partido de Berisso y otros municipios bonaerenses junto al jefe de la Policía Bonaerense, Pablo Bressi, y la cúpula de esa fuerza.
La metodología, que ya fuera empleada tanto en la campaña presidencial como luego del “cacerolazo” por las tarifas por funcionarios de Cambiemos, fue utilizada esta vez por el ministro, quien también estuvo acompañado por el intendente local, Jorge Nedela, y efectivos de la fuerza.
Ritondo encabezó el timbreo en Berisso junto al intendente local, Jorge Nedela.
“Tocar el timbre, saber lo que le pasa al vecino y que se sienta acompañado por la policía es importante. Nosotros tenemos el 911 para que llamen a las emergencias, hay un teléfono para que todos los días los policías puedan contactarse con los vecinos y que lo hagan personalmente”, destacó Ritondo.
Asimismo, señaló que “como fuerza política y como Gobierno estamos acostumbrados y nos hemos hecho el ritual de tocar el timbre, y queremos que esta costumbre la vuelva a tener la policía, que vuelva esta relación entre la policía y la comunidad que la rodea”.
Una Policía más capacitada te cuida mejor.https://t.co/z0juCbSCDb
- Cristian Ritondo (@cristianritondo)
Ritondo destacó también que “hoy, en toda la provincia, todos los comisarios salieron a escuchar a los vecinos, en los barrios y en los centros comerciales, para tener un contacto directo y permanente”. “Esperemos que esto se repita en forma constante”, se ilusionó.
El timbreo conjunto puede entenderse como un respaldo al jefe de la fuerza.
“Ésta es la idea de hoy en toda la provincia de Buenos Aires, desde los lugares rurales hasta las grandes ciudades. Queremos que el timbreo sea parte de una costumbre que a partir de hoy tenga nuestra policía”, agregó.
La escena se repitió en otras localidades de la provincia como La Plata, Lanús, Chascomús y Quilmes, donde los Jefes policiales y los integrantes del gabinete del ministro salieron, sin intermediarios, a ponerse en contacto con las preocupaciones de los vecinos.
En ese reparto, a Bressi le tocó timbrear en el populoso distrito de La Matanza, un territorio ampliamente conocido para él, ya que se desempeñó allí como jefe de la División Antinarcóticos.
