Luego de dos años de ardua investigación, la Gendarmería Nacional desmanteló una red de trata en la provincia de San Juan que trasladaba a las mujeres hacia Colombia y detuvo a tres personas en el proceso. Según describieron, los proxenetas se hacían pasar por scouter de modelos -aquellas persona que ayudan al booker de una agencia a localizar posibles personas con potencial para cumplir con la función de promover, exhibir o publicitar productos, mensajes o servicios- y captaban a mujeres en estado de vulnerabilidad (la gran mayoría de las víctimas eran menores de edad) y las trasladaban para que sean explotadas sexualmente en el país vecino.
El hecho se dio a conocer debido a que el 4 de julio pasado fue detenido Gustavo De la Fuente, un reconocido abogado sanjuanino que fue acusado de integrar una red de trata con conexiones internacionales. En la misma causa, Gendarmería Nacional detuvo también a otros dos miembros de la organización: el primero oriundo de colombiano y el segundo nacido en Venezuela. Según los medios locales, los malvivientes atraían a las victimas diciéndole que eran parte de la empresa Belle Argentina.
Se trataba de un supuesto estudio de modelaje que, en realidad, vendía contenido erótico. A través de las redes sociales, contactaban a las posibles víctimas y, mediante ofertas, engañosas y promesas de trabajo y fama, las sacaban del país por la La Rioja. De acuerdo a la información brindada por las autoridades, en uno de los allanamientos realizados por Gendarmería Nacional descubrieron a tres menores de edad que ya declararon en Cámara Gesell y complicaron a los detenidos.
Por otro lado, la Justicia le dictó al abogado prisión preventiva y fue imputado por explotación, trata, por lavado de dinero y tenencia de drogas, debido a los elementos secuestrados en su estudio durante uno de los procedimientos. De la Fuente fue alojado en el Pabellón 1 del Sector II del penal de Chimbas, destinado a los policías y militares condenados o procesados por robos, droga, delitos sexuales y homicidios.
La operación, llevada a cabo por la Unidad de Investigaciones de Delitos Complejos y Procedimientos Judiciales de San Juan junto con otras unidades de Gendarmería y el apoyo de la Subsecretaría de Trabajo del Gobierno provincial y el Programa Nacional de Rescate y Acompañamiento a las víctimas de Trata de Personas, culminó en seis allanamiento que terminaron por desarticular esta banda que cometía delitos de explotación sexual y laboral en plataformas digitales, violando la Ley 26.842. Durante el procedimiento se confiscaron bienes personales de los detenidos, dos automóviles y otros elementos valorados en aproximadamente $120,000,000.
Según se desprende de la investigación, las mujeres eran explotadas sexual y laboralmente en condiciones inhumanas, de hacinamiento, sin calefacción, agua caliente, ni acceso a servicios médicos. Además, compartían habitaciones y objetos sexuales sin higiene. La banda utilizaba redes sociales y otras plataformas digitales para difundir contenido erótico y explícito, financiado a través de pagos con tarjeta de crédito, criptoactivos y otros medios internacionales.