31 Octubre de 2016 20:51
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La sala de un quirófano de un hospital de la localidad de Pergamino se transformó en el escenario de una verdadera batalla campal donde un grupo de personas arremetió a los tiros contra tres jóvenes.
En la madrugada del domingo tres jóvenes irrumpieron en la sala de operaciones del Hospital San José y le dispararon a un grupo de personas. Allí se encontraba un hombre de 25 años, herido por un enfrentamiento sufrido previamente con ellos.
Tres jóvenes entran a los tiros al Hospital San José.
El joven herido esperaba junto a otros dos en la guardia. En ese momento aparecieron los otros tres, por lo que corrieron a esconderse al quirófano, donde les dispararon al menos cuatro tiros, que por milagro no llegaron a impactar en nadie.
Minutos antes de que irrumpieran en el quirófano se estaba asistiendo allí a una mujer embarazada a la que se le practicaba una cesárea. Afortunadamente ya había concluido para cuando ingresaron los agresores.
La policía detuvo a tres personas de 20, 25 y 26 años, entre las que se encontraba el joven herido, quien quedó internado. El presunto autor de los disparos permanece prófugo.
El autor de los disparos aún continúa prófugo.
Los detenidos que están alojados en la comisaría 2da.de Pergamino fueron indagados en el marco de la causa por los delitos "daño doblemente agravado por ser en un edificio público y por el uso de arma de fuego, portación de arma de fuego, lesiones graves y lesiones leves".
Triste estadística
Lo sucedido en el Hospital San José no deja de ser parte de una triste estadística. La Agremiación Médica de La Plata denunció que cada 48 horas un integrante del equipo de salud es agredido en su trabajo y estimó que 8 de cada 10 profesionales son víctimas de algún tipo de violencia, pero por temor o falta de expectativas sobre el resultado de la gestión sólo dos hacen la denuncia.
La violencia dentro de los hospitales va en incremento.
La directora del Hospital San José, Cecilia de Marco señaló: “Tenemos personal policial de custodia pero no alcanza". Si bien la profesional dijo que ya se vivieron hechos violentos en las guardias por “cuadros de excitación y por peleas con gente bajo efecto de drogas y alcohol”, reconoció que nunca había pasado nada similar. "Algo de esta magnitud nunca pasó y estamos conmocionados", concluyó.
