29 Noviembre de 2024 16:40
En un fallo reciente, la justicia condenó al sindicato de la Sanidad, liderado por Héctor Daer, uno de los máximos referentes de la Confederación General del Trabajo (CGT), por irregularidades administrativas. Además se sumó una condena por hechos de abuso sexual en el ámbito laboral cometidos por su superior de rango jerárquico hacia una empleada durante nueve años.
La Justicia condenó al Sindicato de la Sanidad a pagar más de $7 millones y costas por el delito de violencia de género. La sentencia condena a la agrupación gremial que lidera Daer, uno de los jefes de la CGT junto con Carlos Acuña, jefe del sindicato de empleados de estaciones de servicio a pagar la indemnización por despido, más daño moral y psicológico por la violencia sufrida por la mujer y por no haber hecho nada por detener esto.
La decisión fue tomada por el Juzgado Nacional de 1ª instancia del Trabajo Nº 73, con un fallo dictado el pasado lunes, 25 de noviembre, Día Internacional de la lucha contra la Violencia hacia las Mujeres, con la firma del juez Diego Fernández Madrid.
Esto fue un gran paso en el colectivo femenino, ya que el documento sienta un precedente importante debido a que no es tan común que se obligue a un empleador a responder por un subordinado en casos enmarcados en violencia de género y además por el hecho de que se condene a un sindicato.
Al ser notificada de la decisión judicial, la demandante dialogó con el medio elDiarioAr: "Cuando mis abogadas me lo comunicaron tuve una mezcla de emociones muy difíciles de explicar. Alegría, lágrimas, alivio y por sobre todo paz. Sentí paz en mi alma, después de tanto dolor, tanta violencia. El proceso fue durísimo", contó con la voz quebrada, atravesada por las emociones de conseguir ser escuchada, una lucha que viene con alto y bajo a lo largo de los años, pero que se impone con más fuerza a medida que pasa el tiempo.
El fallo da por probado que su jefe inmediato, David Israel Cardozo, delegado de la entidad sindical en el Instituto Privado de Oncología "Alexander Fleming", tenía un trato "peyorativo, despectivo e insultante". Haciendo abuso de su poder, y con insultos de por medio: "Se sentaba en su sillón, se apropiaba de su computadora ignorando su presencia, en una clara muestra de superioridad, le decía 'gorda', 'sucia', 'negra', etcétera. En más de una oportunidad tuvo que cerrar los cajones de su escritorio con llave porque sustraía documentación de trabajo tales como recibos y dinero del cobro de las capacitaciones y comprometía su tarea". Por otro lado, se registraron dos situaciones de manoseos y violencia física, según el expediente.
La mujer pidió ayuda a sus superiores pero fue ignorada al contar que sufría comentarios constantes sobre el cuerpo, la edad y su sexualidad; comentarios de contenido sexual en el lugar de trabajo y a través de WhatsApp. Por otro lado, recibió en su teléfono celular de fotografías de mujeres con poca o sin ropa insistiendo para participar de relaciones sexuales con él u otras personas. También recibió amenazas con dar a conocer a su familia, amigos/as y conocidos que fue a lugares swinger con él. Manoseos en contra de su voluntad en la cocina del lugar de trabajo, también quedaron asentados en la denuncia.
Norberto Maschio, secretario de Prensa, responsabilizó a la mujer, diciendo que si sufrió manoseos fue porque lo permitió: "Cerrá todo con llave y métetela en el cul*", fue la frase que recibió como ayuda. El sindicato de la Sanidad, liderado por Héctor Daer, deberá pagar más de $7 millones y costas porque según explicó la abogada de la denunciante: "La persona que cometió estos abusos fue denunciado penalmente, pero es el sindicato el su rol de empleador el que debe garantizar que sus empleadas no sean víctimas de violencias de género o, en su caso, enterado de lo sucedido actuar en consecuencia. Es paradójico que en un sindicato la actitud adoptada sea intentar tapar todo y no hacer cargo a los responsables, como se intentó en este caso".