Ni una menos
06 Junio de 2024 11:16
Isondú Marisel Fernández tenía 22 años y vivía en una estancia ubicada en un pequeño pueblo llamado Parada Acuña, en Curuzú Cuatiá, perteneciente a Corrientes, junto a su hermana, Aitana, de nueve años y su novio, Miguel Andrés Zárate. Hace un tiempo atrás, el hombre de la casa decidió darle alojamiento a un amigo de él para que se una a la convivencia por no tener una vivienda fija y pasados los días, éste mismo cometió un doble femicidio: mató a las hermanas y se dio a la fuga.
Antonio Villalba, de 41 años, es intensamente buscado. Fue el martes a las 18:30 cuando Miguel Zárate arribó a su domicilio luego de una intensa jornada laboral y mientras bajaba de su camioneta, se topó con una secuencia que le llamó la atención: quien era su amigo, huyó corriendo de la vivienda a toda velocidad y sin omitir ninguna palabra. Cuando Miguel ingresó, entendió el motivo de la fuga: su amigo había cometido un doble crimen.
La secuencia fue tan rápida como impactante. Zárate se bajó rápidamente de su camioneta tras ver como Villalba huía y en cuanto ingresó a su casa, vio lo sucedido: el cuerpo de Fernández estaba arrojado en la habitación con varias heridas cortantes en sus brazos y dos heridas punzantes en el tórax que habrían sido los causales de su muerte. En la cama se encontraba Aitana, herida y con todo su cuerpo lleno de sangre.
Si bien solo pasaron 48 horas del doble femicidio, la investigación se puso en marcha desde el comienzo y ya se pudieron detectar varios datos en cuestión. En principio, el informe preliminar de la médica policial indica que pudo haber sido estrangulada con el cinturón de su guardapolvo, tras intentar ser atacada sexualmente. El fiscal subrogante Federico Rodríguez junto a la Policía Científica pudieron identificar que la menor de edad fue la primera en ser atacada en un intento de ataque sexual y que Isondú fue asesinada en un intento de defensa a su hermana cuando la encontró estrangulada con el cinturón del guardapolvo en su cama.
Por otro lado, el fiscal señaló que se descarta cualquier tipo de vinculación de Zárate con el doble femicidio, dado que testigos aportaron a la causa que el dueño de la casa arribó al lugar a las 18:30 luego de su jornada laboral. Por su parte, la médica policial estableció que los asesinatos ocurrieron entre las 16 horas y las 18, antes de que el peón llegara a su casa. En consecuencia, el ministro de Seguridad de Corrientes, Buenaventura Duarte, aseguró que el principal sospechoso es Villalba, dado que era el único que se encontraba en el domicilio en el momento del doble femicidio y es quien, además, se dio a la fuga ni bien su amigo llegó a la vivienda.
Hasta el momento, el hombre de 41 años no pudo ser localizado aunque desde la Municipalidad difundieron fuertemente su rostro para que, quien lo vea, pueda dar aviso al 911 y lograr su detención. Por su parte, la Policía realizó una búsqueda con los perros quienes pudieron reconocer su recorrida hasta la ruta provincial 25. A partir de ahí, ya no se ubicaron rastros por lo que se toma como hipótesis que el prófugo pudo haberse subido a un vehículo para abandonar rápidamente el pueblo.
De la vivienda, se secuestraron tres teléfonos celulares, un machete y un cuchillo con los que el asesino habría matado a la víctima de 22 años, y además, debajo de la cama en la cual cometió el crimen de la menor, también se vieron un par de zapatillas con manchas de sangre que serán investigadas.
