23 Enero de 2020 10:58
El ministro de Seguridad de la provincia de Buenos Aires, Sergio Berni, volvió a su rol de “Súper Berni”. Es que luego del crimen de Fernando Báez Sosa en Villa Gesell, el funcionario pasó toda la noche recorriendo los boliches de la localidad balnearia para asegurarse que no vuelvan a suceder episodios de violencia y controlar la venta de alcohol.
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Incluso luego de la recorrida se clausuró el boliche Le Brique, en donde Báez Sosa había asistido antes de ser asesinado por una patota de diez rugbiers. El motivo de la clausura fue la violación al Artículo 5 de la ley de Nocturnidad en donde se establece que la venta de bebidas alcohólicas debe terminar a las 4:30.
Además, se labró un acta al boliche Pueblo Límite por infracción al artículo 3 de la citada ley, que regula los horarios de ingreso hasta las 2:00 AM. Durante la recorrida Berni ingresó al boliche Pueblo Límite a las 3.45 de la mañana, donde chequeó el funcionamiento de las salidas de emergencias y recorrió el lugar durante 20 minutos.
Los antecedentes de Berni
En 2012 una nube tóxica cubrió gran parte de la Ciudad. El entonces secretario de Seguridad se encargó de estar adelante del operativo para determinar las causas de la nube. "Fue un incendio dentro de un container. Estamos produciendo el enfriamiento de los tambores donde venía el plaguicida" que se prendió fuego, explicó Berni en su momento.
Al año siguiente protagonizó un recordado episodio cuando liberó tres carriles de la Panamericana en el medio de una marcha de trabajadores despedidos. Al lugar llegó con uno de los helicopteros de la Policía Federal . "Cortaron de manera irracional y la Gendarmería trabajó y liberó tres carriles. Es inexplicable esta actitud, como si cortando la Panamericana se resolviera el conflicto que tienen en la empresa. La Gendarmería debería estar persiguiendo a delincuentes y no actuando ante un grupo minúsculo de irracionales", dijo el funcionario en ese entonces.
Las novedades del caso
Esta mañana se llevará a cabo la primera de las tres ruedas de reconocimiento para determinar quiénes fueron los rugbiers que participaron del brutal crimen cometido el sábado a la madrugada en Villa Gesell y cuál es el grado de participación de cada uno. Hasta ahora, la fiscal Verónica Zamboni, imputó a dos como “coautores” del homicidio, y a los otros ocho como “partícipes necesarios”.
En la rueda de reconocimiento participarán los diez detenidos por el crimen de Fernando y por primera vez estarán de frente a los amigos del joven asesinado que se encontraban esa noche en el boliche Le Brique, donde comenzó la discusión que luego derivó en la terrible golpiza que acabó con la vida del joven de 18 años. También habrá otras personas que vieron de cerca el momento de la agresión y estará presente Pablo Ventura, el falso acusado que el martes a la noche recuperó la libertad.
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De todos modos, la defensa de los rugbiers cuestionó la rueda de reconocimiento debido a que las fotos de sus defendidos ya fueron publicadas en los medios de comunicación y sus rostros ya se hicieron conocidos para buena parte de los testigos. De todos modos, el fiscal general de Dolores, Diego Escoda, aseguró que la pericia es clave, ya que alguno de los jóvenes que hasta ahora están imputados como partícipes necesarios podrían ser acusados como coautores.
Hasta ahora, los únicos dos que fueron señalados como coautores materiales del crimen son Máximo Thomsen y Ciro Pertossi, de 20 y 19 años. Los otros ocho están acusados por tener vínculo con el crimen, por instigar y por impedir que los amigos de Báez Sosa pudieran socorrerlo y defenderlo.