05 Octubre de 2018 15:51
Omar Alberto Verón fue acusado en el 2014 de violar con un crueldad insoportable a un amigo de su hijo en su casa de Chaco, ubicada en el barrio Jesús de Nazareth.
Aunque se fugó antes de que la policía pudiera detenerlo, lo que llevó a que Interpol hiciera un pedido de captura internacional y a que el Ministerio de Seguridad de la Nación ofreciera una recompensa de $500.000, finalmente este jueves se entregó por su cuenta, y los investigadores descubrieron dos cosas: mientras estaba desaparecido el abusador cobraba un plan social y no se lo había podido detener porque había cambiado mucho su aspecto para evitar ser reconocido.
Omar Alberto Verón está acusado de haber abusado a un menor de edad.
La violación por la cual se lo acusa ocurrió en agosto de 2014 con un amigo de su pequeño hijo, que en ese momento tenía siete años. Según contó la familia del nene, la víctima fue invitada a jugar a la casa de su compañero, y el terrible abuso fue cometido en esa oportunidad por Verón.
El abusador de 53 años prendió la máquina de cortar pasto para que no se oyeran los gritos del niño, y delante de su hijo, violó a su amigo.
Por los daños que le provocó el brutal ataque, el chico de siete años debió someterse a cinco operaciones, y desde hace tres años está internado en el Hospital Garrahan, donde espera recibir un trasplante de intestinos.
La víctima necesita un trasplante de intestinos.
Aunque el acusado se entregó hace pocas horas a la policía, permaneció prófugo durante cuatro años. A pesar de que necesitó cambiar su aspecto físico para no parecerse al que era en el momento del ataque sexual, eso no impidió que el sospechoso continuara durante todo este tiempo con el cobro mensual del Plan Hogar del Anses (por el cual se obtiene entre 250 y 280 pesos).
El portal Chaco por Día informó que su cambio físico hizo que las fuerzas de seguridad no pudieran reconocerlo cada vez que iba a cobrar, y además, vivía con unos familiares que lo escondían cerca del Cementerio Municipal.
Tras su detención, se espera que el lunes se le tome declaración indagatoria, y seguramente el próximo paso será dictarle la prisión preventiva para que no pueda seguir en libertad.
Según indicó la fiscal Daniela Meiriño, se lo imputará por abuso sexual agravado, un delito por el que podría enfrentar penas que van de 6 a 15 años de prisión.