14 Marzo de 2025 09:42

La violencia estalló sin previo aviso en un colectivo de la línea 96, sumiendo en el caos a los pasajeros que jamás imaginaron que el trayecto cotidiano se convertiría en una escena de terror. Eran las cuatro de la tarde en González Catán cuando dos mujeres abordaron la unidad, una de ellas embarazada. Lo que parecía un incidente menor por el impago de un boleto, desembocó en un ataque feroz contra el conductor, quien terminó con el rostro ensangrentado.
Las testigos relataron cómo, apenas subieron, las agresoras comenzaron a increpar a los pasajeros con actitudes violentas, al parecer con intenciones de robo. En medio del desconcierto, el chofer intentó intervenir para calmar la situación, pero su gesto desató la furia de las mujeres. Los gritos de los pasajeros se mezclaron con los insultos de las atacantes, quienes, fuera de control, se abalanzaron sobre el conductor. "¡Viejo de mierd...! ¡Grabalo! ¡Grabalo!", se escucha en un video estremecedor que se viralizó en redes sociales. Rasguños, golpes y sangre marcaron el rostro de la víctima, mientras el resto de los presentes imploraban para que la brutal escena terminara.
Finalmente, las agresoras descendieron del vehículo, dejando tras de sí una estela de horror y un chofer herido. La indignación no tardó en extenderse. Como respuesta inmediata, los colectiveros de las líneas 96 y 621 paralizaron sus recorridos en un acto de repudio a la creciente ola de violencia que acecha a los trabajadores del transporte público. "No podemos seguir trabajando en estas condiciones. Salimos a la calle sin saber si volveremos a casa", manifestaron entre la bronca y el temor. Este nuevo episodio -que quedó filmado gracias a las cámaras de los teléfonos de los pasajeros- puso sobre la mesa un problema urgente: la inseguridad en los colectivos, que día a día expone a choferes y pasajeros a situaciones de riesgo extremo. Mientras tanto, el chofer agredido se recupera de las heridas.