Tiene 12 años y mató a su padrastro para salvarle la vida a su madre: el duro relato de la hermana

Una escena de violencia de género en el seno de una familia de la localidad bonaerense de San Francisco Solano terminó con un hombre de 37 años asesinado de cuatro puñaladas por su hijastro de 12 años, quien defendió a su madre de un intento de homicidio y una nueva golpiza por parte de su agresor. "La estaba ahorcando y mi mamá se estaba muriendo", aseguró la hermana del menor, que por su edad es inimputable para la Justicia.

Todo comenzó cuando Rubén Cardozo de 37 años llegó en estado de ebriedad al domicilio ubicado en la calle 868 al 2800. Allí comenzó a golpear a la madre de dos de sus hijos, que estaba acostada en su habitación. Allí fue que el defensor de su madre se levantó, fue a buscar un cuchillo de cocina y atacó a su padrastro con cuatro puntazos por la espalda. La víctima se levantó malherido y se desplomó en la puerta de su hogar, para enseguida fallecer.

"Mi mamá estaba durmiendo. Se levantó y le encajó una piña de una, tiene un chichón en la frente. De ahí, comenzó a golpearla, golpearla, golpearla", relató Candela, hermana del menor, en Radio Mitre. "No paraba, no paraba. La estaba ahorcando y mi mamá se estaba muriendo", agregó la mujer.

"Le dio donde pudo, creo que fueron tres, y en una se ve que le pegó mal. Ahí fue cuando la soltó a mi mamá y empezó a desangrarse. Hizo lo que tenía que hacer. Defendió a mi mamá, creo que si yo estuviera en esa situación hubiera hecho lo mismo", justificó la joven. En relación a su hermano, explicó que "se siente culpable", que "está muy mal" y que "se quedó dormido llorando".

La madre del niño ya había hecho una denuncia por violencia de género en 2023, aunque la situación no escaló porque ella decidió perdonarlo y evitar alguna medida perimetral para frenar la conducta agresiva que tenía. En ese sentido, la Fiscalía N°1 de Menores del Departamento Judicial de Quilmes, que conduce María Julia Bottaso, investigará el estado en el que llegó Cardozo, entre otros elementos.

Si bien el menor es inimputable, la Policía Bonaerense que se acercó al lugar secuestró el cuchillo para poder investigar la causa bajo la carátula de "homicidio en legítima defensa propia y de terceros". En ese sentido restan las declaraciones en cámara Gesell de los hermanos del menor, presentes durante la agresión.