21 Noviembre de 2024 12:08
Las y los trabajadores de la fábrica de alfajores Jorgito impidieron que un incendio avanzara y queme toda la planta ubicada en Treinta y Tres Orientales y Las Casas, en el barrio porteño de Boedo. Lo hicieron antes de que lleguen los bomberos, aunque terminaron con 80 evacuados, uno de ellos con asistencia de oxígeno, tras haber aspirado gases tóxicos y humos que podrían comprometer su salud.
"El fuego se originó en un cuarto de refrigeración situado en la azotea, en un área de aproximadamente 6x5 metros y 2,80 metros de altura. El foco ígneo afectó compresores y cableados en una extensión irregular de 2x1x1 metro", comunicaron desde la Policía de la Ciudad Autónoma de Buenos Aires (CABA). El predio cuenta con una planta baja y dos pisos más, además de la terraza donde comenzó todo.
La misma fuerza de seguridad reconoció que el incendio "fue combatido inicialmente por los empleados de la fábrica, quienes utilizaron un extintor manual a base de polvo químico, logrando extinguir el fuego antes de la llegada de los bomberos". La gesta evitó una tragedia mayor, que podría haber afectado muchas vidas, además de las pérdidas multimillonarias.
El empleado que arriesgó su vida para evitar que se propague el incendio fue asistido con oxígeno debido a las lesiones leves que sufrió cuando sofocó las llamas, el Servicio de Atención Médica de Emergencia (SAME), informó que "no se reportaron daños mayores ni otros heridos" por fuera de este. A su vez, se sabe que asistieron en el lugar a otros tres evacuados.
En la planta trabajan todos los días 250 personas y se producen entre 500 y 600 mil alfajores cada jornada. La marca Jorgito está bien inserta en la CABA y los alrededores del Conurbano Bonaerense. Según aseguró a La Nación el director de la firma, Carlos "Cacho" Fernández, el fuerte de ellos es esa zona, en la que venden un 75 por ciento de su producción.