Un milagro ocurrió en La Plata. En la mañana del viernes, un hombre de 38 años llegó al Hospital San Martín, de dicha ciudad, porque tenía un fuerte dolor de cabeza. Según pudo relatar en la guardia médica, había sufrido un asalto y tras el hecho, comenzó a dolerle mucho uno de los parietales. Cuando los profesionales de la salud lo revisaron, no pudieron creer con lo que se encontraron: el hombre tenía una bala en su cráneo.
Según contó la víctima, en medio del asalto, fue golpeado por dos delincuentes que lo abordaron por sorpresa cuando él estaba en una parada de colectivos. Durante la pelea, perdió el conocimiento. Cuando despertó, se sentía muy mal y tenía un dolor de cabeza insoportable. Pensó que lo habían golpeado y tenía un chichón y una herida. Pero era más grave.
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Tras someterlo a una tomografía, los médicos se encontraron con el proyectil en la cabeza. De inmediato se dieron cuenta que no había muerto de milagro y por milímetros. La bala había quedado en el hueso y no pudo tener contacto con el cerebro. Según relató, el asalto fue en la esquina de las calles 60 y 147, en La Plata.
Tras visitar a una amiga a pocas cuadras de ahí, lo atacaron por la espalda. Como se resistió y le dio una trompada a uno de los malhechores, la pelea parecía seguir, hasta que cayó desmayado por un impacto en la cabeza. Pensó que lo habían derribado de un golpe cuando despertó. También notó que le habían robado su bolso y su celular. Y se sentía muy mal.
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Por eso, se dirigió a una Unidad de Pronta Atención (UPA) y luego se trasladó hacia el ex Policlínico. Allí los médicos. Durante los estudios descubrieron que tenía la bala en la cabeza y que solo se había lastimado parte del cuero cabelludo. Corroboraron que no tenía ninguna parte ósea dañada y tampoco había heridas de mayor gravedad.
En las próximas horas, el hombre será operado para extraerle el proyectil de la cabeza. En tanto, la Policía continúa en investigación para poder determinar quiénes son los hombres que intentaron quitarle la vida y le robaron sus pertenencias. Por ahora, revisaron las grabaciones de las cámaras de seguridad de la zona. La investigación quedó a cargo de la comisaría 3° y la UFI N° 9.