A poco más de una semana del brutal crimen de Sheila Ayala, la menor de 10 años que fue asesinada en la localidad bonaerense de San Miguel, otra niña -esta vez de 9 años- fue encontrada sin vida con una bolsa plástica en la cabeza, semidesnuda, con heridas cortantes y golpes, en las inmediaciones de la estación de trenes José Mármol, del partido bonaerense de Almirante Brown.
La policía encontró el cuerpo en las inmediaciones de la estación de trenes José Mármol.
Por el crimen fue detenido su primo de 15 años, quien la habría intentado abusar y frente a la resistencia de la menor la mató a golpes y puñaladas en un galpón. En este contexto, las fuentes policiales sospechan que el adolescente usó la camioneta de su abuelo para descartar el cuerpo.
Estefanía tenía solo 9 años.
En el marco de la causa se realizaron dos allanamientos, durante los cuales fue detenido el adolescente sospechoso -que al igual que la víctima pertenece a la comunidad gitana- y se secuestraron prendas de vestir suyas manchadas con sangre y la camioneta.
El hallazgo del cuerpo se produjo anoche, cerca de las 21, en el corredor de la calle Erezcano y las vías de la estación de trenes José Mármol, de la línea Roca. La policía llegó al lugar alertada por los vecinos y encontró el cuerpo de la niña, identificada por la policía como Estefanía Samira Bonome.
La nena fue encontrada sin ropa y presentaba puñaladas por todo su cuerpo.
El cuerpo de Estafanía estaba boca abajo, semidesnudo y con una bolsa plástica que le cubría la cabeza. Los médicos de la Policía Científica determinaron a primera vista que la víctima presentaba golpes y cortes en la mano derecha, en el abdomen, en una ceja y otro muy profundo en la muñeca izquierda, lo que habría provocado su rápido desangrado.
El descargo de la abuela de la menor.
En base a las primeras pesquisas realizadas, los investigadores establecieron mediante el análisis de las cámaras de seguridad de la zona que una camioneta Mercedes Benz blanca, con caja térmica, había pasado por la zona donde se encontró el cuerpo. Ese vehículo resultó pertenecer al abuelo del primo de la niña ahora detenido, explicaron las fuentes.
También en el marco de la causa se estableció que durante la tarde de ayer Estefanía y su primo adolescente habían estado jugando a las escondidas en la puerta de la casa de ella. Por orden de la fiscal 16 de Lomas de Zamora, Marcela Juan, se realizaron dos allanamientos, uno en la casa del abuelo del joven sospechoso y otro en un galpón situado en Amenedo y Chayte.
El joven de 15 años acusado de asesinar a Estefanía.
En el primer lugar, una casa situada en Benardi al 2700, la policía detuvo al adolescente sospechoso y encontró un jean azul y una campera inflable roja que durante la tarde llevaba puestos, ambos manchados con sangre. En el galpón, en tanto, se secuestró la camioneta y se encontró un goteo de manchas de sangre.
Esto último hace presumir a los investigadores que el crimen se cometió ahí y que luego el cuerpo fue llevado en ese vehículo al lugar donde fue encontrado. Tras el arresto del adolescente, la fiscal se declaró incompetente y remitió la causa a la Fiscalía de Responsabilidad Penal Juvenil 2 de Lomas de Zamora, a cargo de Hernán Cerutti.
Familiares y vecinos de la víctima y del joven negaron que se tratara de una cuestión interna de la comunidad gitana - ya que las pesquisas procuraban determinar si estuvo relacionado con alguna venganza entre integrantes de la comunidad gitana- y creen que el ahora detenido no está bien neurológicamente, además de que tiene problemas con las drogas.
Visiblemente conmovida, la mamá de Estefanía y pidió la “pena de muerte” para el adolescente de 15 años. “Me la mató. Quiero que lo maten. ¿Cómo le hizo eso a mi hija? Quiero justicia por mi hija, quiero que lo maten”, expresó. Al mismo tiempo, y en medio de los gritos de la angustiada mujer, el padre de la menor exigió que le den “cadena perpetua”.
La mamá de Estefanía sufrió un ataque de nervios tras la muerte de su hija.
“Yo tuve que reconocer el cuerpo. Le rompió toda la boca, los ojos. Quiero que lo pague. Que lo hagan mierda en la cárcel, que le den perpetua”, manifestó. Pocos minutos después, a la mamá de la nena de 9 años le dio un ataque de nervios y perdió el conocimiento, por lo que tuvo que ser retirada con la ayuda de familiares y vecinos que pedían justicia por Estefanía.