El barrio porteño de San Telmo fue la escena de varias horas de tensión ayer por la noche cuando un militar retirado ucraniano se atrincheró en el baño de su casa, luego de ser denunciado por su mujer por violencia de género y de efectuarle disparos a un policía que acudió al lugar tras un llamado al 911.
En el PH, ubicado en la calle Venezuela al 800, también se encontraba dentro de una habitación un policía de la División Motorizada de la Policía de la Ciudad, que logró ingresar a la propiedad y poner a resguardo a la mujer del hombre y a su hijo.
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Fuentes policiales explicaron que todo comenzó ayer por la tarde, cuando la mujer de un militar retirado ucraniano se comunicó con el teléfono de emergencias 911 para denunciar un episodio de violencia de género del cual había sido víctima.
Un policía que se encontraba en Venezuela y Tacuarí, a menos de una cuadra de la vivienda, acudió de inmediato. El uniformado tocó la puerta y avisó que era policía, tras lo cual le abrieron y desde dentro de la propiedad le efectuaron varios disparos.
Ante esa situación, el oficial repelió la agresión y se puso a resguardo, informaron fuentes policiales. Minutos después, llegó al lugar un efectivo de la División Motorizada, que también había recibido el alerta, y logró ingresar al PH y poner a resguardo en una habitación a la mujer del militar y a su hijo.
En tanto, el hombre, que aparentemente se encontraba alcoholizado, permanecía atrincherado en el baño, armado y con la puerta abierta, desde donde tenía visión de toda la casa, motivo por el cual el policía no podía moverse de ese ambiente.
Por esta situación, llegaron al lugar efectivos de la División de Operaciones Especiales Metropolitanas (DOEM) de la Policía de la Ciudad, quienes lograron rescatar al primer policía que había acudido a la vivienda, quien resultó ileso de los disparos que le realizó el ciudadano ucraniano.
De acuerdo a los voceros, el militar retirado llamó a su abogado, quien a su vez se comunicó de manera telefónica con los encargados del operativo para solicitar la presencia de un negociador.
El hombre, de 51 años, estaba armado con dos pistolas y una carabina y además llevaba puesto un chaleco antibalas. Aparentemente alcoholizado, el ex militar permaneció atrincherado en el baño, armado y con la puerta abierta, desde donde tenía visión de toda la casa, motivo por el cual el policía no pudo moverse de ese ambiente.
En tanto, su familia y el primer policía que acudió en su ayuda siguieron dentro de una de las habitaciones y no pudieron salir durante un largo rato por temor a ser atacados. De acuerdo con lo que se informó en su momento, la mujer y sus dos hijos son argentinos.
Por otra parte, según trascendió, durante los incidentes el ex militar habría hecho algunos comentarios incoherentes sobre la ex Unión Soviética y sobre los gobiernos de Néstor y Cristina Fernández de Kirchner.
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Finalmente, luego de más de dos horas de tensión, el hombre pudo ser reducido por los efectivos policiales y fue trasladado hasta el Hospital Argerich, donde fue revisado por los médicos antes de quedar a disposición de la Justicia. En la causa interviene la Fiscalía 62 a cargo del doctor Ariel Yapur.