Era un día totalmente normal para los alumnos del sexto año del colegio Cristo Rey de General Bustos, Córdoba. Sin embargo, un descuido durante la hora de Química transformó el salón en un verdadero infierno: cuatro estudiantes sufrieron quemaduras en distintas partes del cuerpo a causa de una explosión que derivó de uno de los experimentos de la materia.
De los cuatro estudiantes heridos, Micaela Cuello es la joven que recibió la peor parte y permanece internada esta tarde en terapia intensiva. Según precisó el médico, la adolescente “se encuentra con respiración mecánica asistida y tiene el 15 % de su cuerpo quemado”. “Ahora hay que esperar de 24 a 48 horas para ver cómo evoluciona”, agregó el informe presentado por los médicos.
Daniel, el padre de la alumna, realizó un duro descargo contra las autoridades del colegio: “Tenían que hacer un trabajo y el colegio no estuvo presente esto. Se quemó la cara, los brazos, los hombros, la garganta, el colegio un desastre, todo el tiempo molestando, pidiendo plata y no había una profesora prestando atención. Estoy mal, mal porque mi hija está en terapia intensiva, dormida. Tiene toda la cara destruida, estamos devastados”, agregó en diálogo con La Voz.
Al ver la gran repercusión del hecho, la directora del Colegio Cristo Rey, Alejandra Olmos, aseguró que la explosión se generó por una “imprudencia de un estudiante que no acató las normas de seguridad indicadas por la docente”, y que, por esa razón, se generó una “combustión mayor en el experimento” que estaban realizando. “No fue adrede y generó una combustión de mayor nivel que la que se esperaba”, sostuvo Olmos.
Además, remarcó que la docente estaba presente en el momento de accidente y aclaró que a raíz del incidente, se suspendieron las clases este martes en el colegio. El incidente ocurrió en el laboratorio de ese establecimiento educativo ubicado en barrio General Bustos, cuando se encontraban en clase práctica de Química. A pesar de los dichos de la directora, el padre de Micaela sostuvo que durante la práctica “no había profesional y ni docentes asistiendo”.
El jefe de Guardia del Instituto del Quemado, Martín Rapetti, informó que Micaela se encuentra en terapia Intensiva con quemadura del 15%, un alumno con 4% de quemaduras sobre su cuerpo y el restante solo tenía heridas superficiales y fue dado de alta. “Hay un menor que estuvo internado en sala común, con un 4% de su cuerpo con quemaduras que no revisten gravedad. También quedará en observación”, informó el Jefe de Guardia del hospital.
Bomberos que trabajaron en el lugar precisaron que tras la combustión se activaron los extintores del laboratorio de química y que fue eso lo que evitó que las llamas se propaguen por el resto del edificio. Además, confirmaron que no fue necesario evacuar el lugar. Producto de la explosión, los cuatro alumnos fueron trasladados al Instituto del Quemado en la capital cordobesa. Dos de ellos con quemaduras de primer grado y Micaela con un estado más comprometido.
El comisario Fabián Tissera, de la Brigada de Materias Peligrosos de la policía local, dijo que el incidente lo controlaron rápidamente los mismos alumnos con el accionar de un extintor y que “dos alumnos resultaron con quemaduras leves de de primer grado” y fueron derivados al Instituto del Quemado, y un tercero que fue retirado por sus padres.