Una mujer de 37 años fue asesinada por su pareja, quien le dio seis puñaladas en la entrada de su vivienda en la localidad de Venado Tuerto, en la provincia de Santa Fe. En un principio, las hipótesis señalaban que fue en un intento de robo, pero las cámaras de seguridad de la zona mostraron a su esposo mientras la atacaba.
Antes de que se descubra lo que había ocurrido, el caso se caratuló como 'homicidio en ocasión de robo'. El agresor, Marcelo Iván G de 43 años, después de lo ocurrido escapó por los techos de la casa de su suegra para evitar ser detenido y se dirigió a su trabajo, en una planta cerealera que se ubica a pocas cuadras del lugar. Más tarde, declaró como testigo.
"Una mujer de 37 años fue asesinada este jueves cuando se dirigía a trabajar al Hospital Provincial Dr. Alejandro Gutiérrez, en Venado Tuerto. El crimen se registró alrededor de las 6 en la intersección de Chile y Cerrito en barrio Iturbide y, según las primeras informaciones, ocurrió cuando a la víctima la abordaron para robarle la moto en la que iba a trabajar y la apuñalaron", indicaba el primer informe.
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Sin embargo, los investigadores encontraban sospechoso que la mochila y la moto de la víctima, identificada como Stella Maris Eidner, estaban intactas: "Las manchas de sangre no eran abundantes. No parecían las de una mujer que había sido apuñalada varias veces", afirmó Iván Raposo, el funcionario del Ministerio Público de la Acusación.Además, detalló que "los forenses explicaron que la ausencia de sangre en relación a las puñaladas recibidas, obedece a que fueron cortes muy profundos y eso hizo que la mujer padeciera hemorragias internas debido a la profundidad de los puntazos".
El hecho ocurrió este jueves cuando Eidner fue atacada a metros de su vivienda en el barrio Iturbide, donde convivía con su esposo hacía 20 años y junto a sus dos hijos, de 15 y 17 años.
En el momento en el que fue embestida, la víctima empezó a gritar pidiendo ayuda y logró despertar a uno de sus hijos que estaba durmiendo. Cuando el joven salió de su casa para ver qué es lo que estaba pasando, intentó auxiliar a su mamá, pero la mujer terminó muriendo en sus brazos. Lo único que pudo divisar el adolescente fue a una persona que se escapaba del lugar, pero no logró identificarla.
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Ante las grabaciones y contradicciones del esposo, Raposo ordenó su detención. Iván tenía cortes en un dedo y gotas de sangre en uno de los zapatos que usaba para su trabajo. Luego de investigaciones, encontraron el arma que fue utilizada para cometer el femicidio en la planta cerealera.El encargado de la planta le confirmó al fiscal que Iván había ido a trabajar el mismo día que se cometió el crimen. La hipótesis desprendida de esto es que el hombre esperó a que su mujer fuera a trabajar para cometer el delito, para luego dirigirse a su lugar de trabajo y cambiarse allí la ropa. Se trata del mismo lugar en el que los peritos encontraron el cuchillo, la vaina y la vestimenta ensangrentada.
“Con el análisis de los registros fílmicos de un vecino, más el posterior secuestro del arma y de la prenda utilizada en el lugar de su trabajo, es que se estableció en esta instancia que esta persona es el autor del crimen”, afirmó Raposo. El funcionario además afirmó que “la funda del cuchillo fue encontrada en su vehículo” y que, según testimonios de los vecinos, “la relación de ambos estaba en crisis”.
Desde el Hospital Regional 'Dr. Alejandro Gutiérrez' compartieron un mensaje: “En representación de todos los trabajadores de la salud que conformamos esta institución, repudiamos el trágico suceso que lamentablemente termina con la vida de nuestra compañera Stella Eidner”. Por otro lado, el agresor participará de una audiencia imputativa bajo la carátula de 'femicidio' el próximo lunes.