16 Enero de 2023 08:02
Este lunes arrancará la audiencia número once del juicio a los ocho rugbiers acusados de matar a Fernando Báez Sosa y, para muchos, será una jornada bisagra debido a que declararán ante el Tribunal de Dolores Juan Pedro Guarino y Alejo Milanesi, los dos jóvenes que fueron sobreseídos en la causa por el crimen del joevn estudiante de derecho y los padres de algunos de los acusados.
En la tercera semana del debate y a días de cumplirse el tercer aniversario del homicidio, la audiencia, prevista a partir de las 9 en los Tribunales de Dolores, ubicados en Belgrano 141, fueron citados ocho testigos, entre ellos Guarino y Milanesi, quienes veraneaban en Villa Gesell junto a los ahora ocho imputados, en un primer momento también fueron detenidos y que, con el avance de la causa, quedaron sobreseídos por falta de pruebas en su contra.
Guarino y Milanesi enfrentarán una declaración “muy delicada”, ya que al ser citados como testigos tienen la obligación de decir verdad y con sus dichos podrían incriminar a sus amigos o bien autoincriminarse, lo que obligaría al tribunal a suspender sus testimonios ya que nadie está obligado a declarar contra sí mismo. “Tendrán que moverse en un margen muy fino, entre decir la verdad y no perjudicar a sus amigos y no caer en un falso testimonio”, especuló un vocero con acceso a la causa.
Juan Pedro Guarino, quien al ingresar al Tribunal sostuvo que viene "a ayudar a la Justicia", no estuvo relacionado directamente con el homicidio de Fernando de acuerdo a lo que consideró el juez de garantías, David Mancinelli. De esta forma el magistrado acompañó el pedido de fiscal, Diego Escoda, que había sostenido el año pasado en el pedido de elevación a juicio que “no se han obtenido elementos que puedan vincular directamente al homicidio”.
La querella que representa a la familia de la víctima no sólo no objetó la decisión, sino que en diciembre ya había acompañado la decisión del fiscal de apararlo de la investigación. "Nosotros tampoco encontramos elementos que justifiquen su imputación", precisó a BigBang Fabián Améndola, quien junto al staff de Fernando Burlando lleva adelante la defensa de los padres de Fernando.
En concreto, el funcionario judicial sostuvo que tanto Guarino (como también Alejo Milanesi), que pasaron 23 días detenido, no fueron reconocidos ni por los testigos ni por las cámaras de seguridad en la escena del crimen. “Si bien tenían algunas lesiones, no se pudo al momento vincular que esas lesiones hayan sido producidas en virtud de este hecho y por lo tanto no existen elementos suficientes para mantener la detención”, declaró el fiscal.
Otro testigo clave de la jornada será Tomás Ítalo Colazzo, amigo de los imputados y quien fue señalado como “sospechoso número 11? por el abogado Fernando Burlando, quien representa a los padres de Báez Sosa como particulares damnificados. “En el caso de Colazzo, también es una situación compleja, por las mismas razones que los dos jóvenes que fueron sobreseídos", explicaron.
La bomba de Guarino que podría marcar un antes y un después para los rugbiers
Y agregaron: "A las que se suma que él nunca fue parte de la causa, nunca brindó declaración ni fue interrogado o intervino en el marco de una actuación judicial que puede ser exigente emocionalmente”. La lista de testigos incluye a Santino Franco Massagli, José Aníbal Leguiza y Juan Ignacio Neme Correa, tres amigos de Blas Cinalli, uno de los ocho imputados, con quienes intercambió mensajes escritos y de audio por WhtasApp tras el hecho, entre ellos.Por último, declararán bajo juramento de decir la verdad ante los jueces del Tribunal Oral en lo Criminal (TOC) 1 las madres de Máximo Thomsen y la tía de Luciano y Ciro Pertossi. Rosalía Zárate, madre de Thomsen, quien era funcionaria de la Municipalidad de Zárate y que renunció tras la imputación de su hijo, será el primer familiar de un imputado en declarar como testigo.
En tanto, María Paula Cinalli, madre de Blas, será la otra madre en sentarse frente a los jueces María Claudia Castro, Christian Rabaia y Emiliano Lázzari. Fuentes de la fiscalía informaron que los padres y madres de los acusados que brindarán testimonio son 'testigos de concepto', y que será la defensa -que los convocó a declarar- la que se encargará de demostrar en el juicio cual puede ser el valor de sus eventuales aportes respecto del hecho analizado en el fallo.
Según el artículo 234 del Código Penal Procesal bonaerense, los padres y madres no pueden declarar contra sus propios hijos, por lo que se cree que la parte acusatoria no les va formular preguntas durante el interrogatorio. Está previsto que los padres de Fernando presencien las declaraciones en la sala de audiencias del primer piso de los tribunales, como ocurrió durante las jornadas anteriores. Los ocho imputados -Máximo Thomsen (23), Enzo Comelli (22), Matías Benicelli (23), Blas Cinalli (21), Ayrton Viollaz (23), y Luciano, Ciro (22) y Lucas Pertossi (23)- también estarán presentes, al igual que desde la apertura del debate oral.