Antes de que termine el miércoles, las calles del barrio porteño de Villa Crespo presenciaron un trágico accidente que terminó con la muerte de un hombre de 63 años, luego de chocar con su camioneta contra dos vehículos y terminar incrustado en un local comercial. Lo cierto es que, según estiman quienes intervinieron en el hecho, todo sucedió producto de una descompensación cardíaca del fallecido. Más allá de la defunción, a la luz de los hechos, todo podría haber salido peor.
Según el registro de las cámaras de seguridad que chequearon los efectivos de la Comisaría Vecinal 15B de la Policía de la Ciudad que se acercaron a la esquina de Juan B. Justo y Martínez Rosas donde ocurrió todo, el fallecido a bordo de una Fiat Toro golpeó a una Ford EcoSport que estaba frenada, luego cruzó de carril y le dio a otra, para luego terminar incrustado en la vereda. Cuando el Servicio de Atención Médica de Emergencias (SAME) llegó al lugar, nada pudo hacer para reanimar al conductor fallecido. Sí pudieron enarbolar que la causa de muerte había sido un paro cardíaco, aunque es una información que deberá ser confirmada por la autopsia correspondiente.
El relato de la primera camioneta que chocó aseguró que este se dio mientras esperaba el semáforo en la esquina de Juan B. Justo y Muñecas, una cuadra antes del lugar donde terminó. El comercio con el cual impactó el hombre de 63 años que pereció, quedó con el frente completamente destrozado.
El Juzgado Nacional en lo Criminal y Correccional N° 12, interviniente en el caso, comenzó un expediente con la carátula de "averiguación de causales de muerte", más allá de todas las conclusiones iniciales que sacaron quienes intervinieron en el accidente. Estas "pruebas" no son suficientes en términos judiciales para determinar de forma científica el motivo del fallecimiento del conductor.
Si bien el resultado de todo el accidente es el de un hombre de 63 años fallecido, lo cierto es, de acuerdo a lo sucedido, y cómo se dieron los eventos, el balance podría ser mucho peor, de cara a la pérdida de control que sufrió quien murió, de forma presunta, por un paro cardíaco mientras estaba al volante.