08 Abril de 2020 17:51
Por estas horas se intentan determinar los factores que llevaron a la muerte a Florencia Magalí Morales, una mendocina de 39 años que había sido detenida en una comisaría de San Luis por haber violado el aislamiento preventivo obligatorio decretado por el gobierno.
El cuerpo de Florencia fue descubierto en las últimas horas en el interior de su celda, en la comisaría 25 de la localidad de Santa Rosa del Conlara, donde la mujer oriunda de Las Heras vivía hace aproximadamente un año. La joven había sido detenida el último domingo.
Las primeras versiones señalaron que Morales fue encontrada sin vida dentro de su celda por uno de los guardias de esa comisaría: tenía en su cuello un cordón, que -detallaron- era de la capucha del buzo que vestía la mujer y que estaba atado a la bisagra superior de la puerta de la celda.
Siempre según el relato policial, fue detenida el domingo cuando iba en bicicleta por las calles de Santa Rosa del Conlara, una localidad del noreste de la provincia San Luis. El parte detalló que la mujer no hizo caso a la voz de alto, por lo que fue detenida y llevada a la comisaría.
En la comisaría, Morales se identificó, pero alegó que no llevaba consigo el documento, aunque sí aportó su número de DNI, con terminación impar. Este último dato es importante debido a que el Gobierno de San Luis dispuso que la circulación sea por la terminación par o impar del documento: y el domingo le tocaba a los pares, por lo que quedó detenida por violar el aislamiento.
“Al ser notificada de que iba a quedar detenida, porque no le correspondía circular en la vía pública por la terminación de su D.N.I., intenta darse a la fuga forcejeando con dos policías de guardia, rasguñando en la mano a un tercero”, reza la explicación policial.
Lo cierto es que su causa por averiguación de incumplimiento a las medidas del Decreto 260/20, artículo 205 del Código Penal Argentino y por resistencia a la autoridad y lesiones recayó en el juez Jorge Pinto.
De acuerdo al parte oficial, los guardias encontraron que Morales tenía “asido a su cuello un cordón (posiblemente de la capucha del buzo que vestía) atado al otro extremo de la bisagra superior de la puerta enteriza de madera de la celda”.
En ese sentido -señalan- los guardias intentaron reanimarla, mientras buscaban “ayuda en el nosocomio local”. Según las fuentes policiales, Morales estaba bajo tratamiento psicológico: se había separado de su violento ex marido y tenía una hija procesada en junio del año pasado, sospechada de haber asesinado a su hija (nieta de Morales).
El mismo juez se hizo cargo de la investigación de las causas de la muerte de la mujer, luego de que el Jefe de la Policía de San Luis, comisario general José Darío Neira, iniciara un sumario administrativo para determinar si hubo alguna responsabilidad de los policías.
El domingo por la tarde, apenas se halló el cuerpo de Morales, se presentaron en la Comisaría el Secretario Penal, el médico forense y de criminalista de la Tercera Circunscripción para realizar la inspección ocular: se ordenó el traslado del cuerpo a la morgue de Concarán para la autopsia.
En las últimas horas, los restos de Morales fueron entregado a su familia, la cual aguarda el informe del forense para saber qué le ocurrió realmente a oriunda de Mendoza, ya que sostienen que fue "asesinada".
"Mi hermana fue asesinada", señaló Andrea Morales, hermana de la víctima, en las redes sociales. Mientras tanto, Asuntos Internos de la Policía de San Luis investiga al personal de guardia, que cumplía funciones ese trágico domingo.
