Era una noche tranquila en Isidro Casanova hasta que, de repente, un impresionante operativo policial comenzó a cercar la calle Soldado Moreno a la altura de 2252. Allí, Walter Ariel Moreno de 43 años, integrante de la Guardia Urbana Municipal y ex agente de la PFA, completamente armado, mantuvo durante horas a su esposa e hija como rehenes. "Las voy a matar", avisó. El barrio fue cercado 400 metros a la redonda con ingresos y egresos restringidos.
Todo comenzó a la tarde del jueves y finalizó durante la madrugada de este viernes. El hijo de las víctimas, de 24 años, logró escapar de las agarras de su padre, con antecedentes de consumo de estupefacientes. escabullirse de la casa y dar aviso a las autoridades. Según contó, Moreno se atrincheró en la casa junto con dos armas y los amenazó con matarlos.
De inmediato, efectivos de la Policía de la Provincia de Buenos Aires, integrantes de la Unidad Táctica de Operaciones Especiales (UTOI) y el Grupo Halcón se hicieron presentes en el lugar y montaron dos anillos perimetrales para evitar que el agresor escape. Las autoridades pudieron reconstruir que las víctimas se encontraban privadas de su libertad en la planta alta de la casa.
"Le voy a pedir perdón en el cielo": murió el padre de Cecilia el día que su hija hubiera cumplido los 29 años
Mientras tanto, Moreno se hallaba en la planta baja, a los gritos, en alerta y, de acuerdo a las fuentes del caso, aparentemente bajo los efectos de cocaína. Las autoridades desplegaron no sólo un negociador para dialogar con el perpetrador con el fin de llevar a buen puerto la liberación de los rehenes y evitar la pérdida de vidas, y a una psicóloga, la cual ingresó a la propiedad para tratar de hacer entrar en razón a Moreno.La tensión y el miedo duraron casi cinco horas, hasta que el Grupo Halcón -al ver que el agresor no desistía- logró entrar a la casa y rescatar a las víctimas. “Pudimos realizar una operación limpia. Se procedió a efectuar un operativo de distracción para poder rescatar a los rehenes que están bien y no sufrieron heridas. Ese era nuestro principal objetivo. Ahora seguimos negociando con el agresor”, explicó Sergio Berni, ministro de Seguridad bonaerense.
Una vez que las víctimas fueron rescatadas, el ex agente de la PFA se atrincheró, pidió fervientemente que “se vayan los agentes” si no “iba a provocar una masacre” y amenazó con quitarse la vida. El operativo policial se mantuvo en el lugar con el objetivo de negociar con el agresor para que se entregue hasta que, finalmente, el Grupo Halcón logró reducir a Moreno tras 12 horas. De acuerdo a las fuentes del caso, todo comenzó con una discusión entre Moreno y su esposa por "celos".