El tratamiento legislativo del proyecto de interrupción voluntaria del embarazo se encuentra cerca de cerrar su segundo round pero, cómo en las peleas míticas de boxeadores argentinos, el resultado incierto puede terminar con una sorpresa de último momento. La votación que se realizará en el Senado el 8 de agosto parece diferente a la que sucedió en Diputados y que le dio media sanción al proyecto.
El gobernador de La Pampa, Carlos Verna, habilitó una ventana que hasta en ese momento casi ninguno de los dirigentes políticos había optado por ver: la de intentar conseguir rédito al apoyar el proyecto. Los cuatro diputados que le responden cambiaron su voto y fueron la clave para que el documento sea aprobado.
A dos semanas de la votación por el aborto, ¿cómo están las posiciones de los senadores?
En el Senado sucede algo similar con los indecisos por estas horas. Se trata de 14 senadores que, tal y como publicó Big Bang, todavía no decidieron (o no quisieron comunicar) como van a votar. “Los que realmente están indecisos son los que todavía no terminaron de medir el impacto de cada una de las opciones”, se sinceró un senador nacional que aún no definió su voto. En su despacho hay una encuesta sobre las posiciones en su provincia natal con un resultado que lo sorprendió: la postura a favor tiene una leve superioridad sobre la contraria.
Esa situación se repite con varios senadores que vieron como en los últimos días la tendencia a favor se vuelve cada vez más amplia. Algunos explican el desglose y sostienen que el promedio también se ve modificado por la incidencia de los grandes centros urbanos en donde el margen entre despenalizar y dejar todo como está ahora es más grande.
Macri y Frigerio analizan si se cambiará o no la postura de la Casa Rosada sobre si se intervendrá o no.
Mientras tanto, en la Casa Rosada comienzan a ver el mismo escenario, lo que genera una serie de dudas internas sobre las cuales aún no hay definición. En la votación en Diputados se vio por primera vez que el Poder Ejecutivo no interviniera en lo que sucedía en el recinto. “Fue la primera votación en años que sólo nos limitamos a ver por televisión”, se sinceró uno de los colaboradores del ministro de Interior, Obra Pública y Vivienda, Rogelio Frigerio.
Ahora el panorama no se encuentra tan claro. Si bien el presidente Mauricio Macri volvió a manifestar que, aunque se encuentra en contra de la despenalización, la Casa Rosada no tendrá injerencia alguna en el debate ya comenzaron a haber algunas voces que le recomiendan que tenga una postura más activa para convencer a los indecisos para que apoyen el proyecto. En los números que manejan en Balcarce 50 se refleja que no se encuentra tan claro para la sociedad que la no aprobación del proyecto no impacte en la imagen del Gobierno. “Es muy difícil explicar la postura”, se sinceran.
Aborto: buscan introducir modificaciones al proyecto original para atraer indecisos
Gente muy cercana al Gobierno que se expresan abiertamente a favor de la despenalización como es el caso de la esposa del jefe de Gabinete Marcos Peña, Luciana Mantero. En un vídeo que se viralizó, les pide a los senadores que voten a favor del proyecto. "Con pesar, con dolor, miles de mujeres deciden cada año hacerse un aborto. Senadoras y senadores, denles la posibilidad de acceder a condiciones sanitarias seguras, a no tener que arriesgar sus vidas. Acceder a consejerías. Que el aborto sea ley. Aborto legal ya", afirmó Mantero.
Lo mismo sucede con el ministro de Salud, Adolfo Rubinstein, quien en las intervenciones que tuvo primero en Diputados y luego en Senadores se encargó de remarcar que los abortos continuarían realizándose con o sin despenalización, por lo que es una política de salud pública aprobar el proyecto. El ministro señaló que a diferencia de lo que se busca instalar, el Estado tendría hasta un ahorro fiscal al despenalizarlo debido a se ahorrarían todos los gastos en hospitales por abortos mal practicados.
El ministro de Salud, Adolfo Rubinstein, uno de los principales impulsores del proyecto.
“No por nada la marcha que convocó la Iglesia se concentra en la Quinta de Olivos. Nadie mastica vidrio”, se encargaron de remarcar desde el Gobierno ante la consulta de Big Bang por la situación con la Iglesia y los grupos que buscan que el proyecto no se apruebe.