Agresión, violencia y tensión: Gendarmería reprimió a trabajadores bajo la mirada de Marcos Galperín

Este miércoles 30 de octubre, los gremios de transportes se unieron para realizar un paro de 24 horas acompañado de manifestaciones en las calles y también organizaron ollas populares.  Distintos puntos geográficos se convirtieron en el centro de tensión en medio del malestar de los empleados estatales que luchan contra la motosierra de Javier Milei.

Los trenes y subtes pararon por completo el servicio, así como lo hicieron los transportes aéreos y marítimos: los vuelos están cancelados o reprogramados, y el transporte de mar completamente detenido. Los camioneros cortaron servicios de transporte de carga por carretera y, a la medida de fuerza se sumó el sector de educación, incluyendo docentes y universitarios, por lo cual no hay clases.

El depósito de Mercado Libre en La Matanza se convirtió en escenario de enfrentamientos entre manifestantes y fuerzas de seguridad. Recientemente el intendente Fernando Espinoza fue denunciado por la clausura de centros de distribución de la firma de e-commerce en ese partido del conurbano bonaerense.

Militantes de la Unión de Trabajadores de la Economía Popular (UTEP) y del Movimiento Evita participaron de la manifestación en contra de las medidas tomada en el último tiempo por Javier Milei. En consecuencias, la Gendarmería y trabajadores de PSA reprimieron injustamente bajo las indicaciones de los libertarios.

Todo comenzó cuando los manifestantes decidieron cortar la calle cerca del depósito en la localidad de Tapiales, pero fracasaron en el intento debido a la brutalidad de las fuerzas de seguridad. Se produjeron enfrentamientos y utilizaron gases lacrimógenos para dispersar a los trabajadores, quienes sólo trataron de defenderse de las Fuerzas del Cielo.

Con el objetivo claro de visibilizar su reclamo, militantes de la UTEP y del Movimiento Evita se trasladaron hacia la Avenida General Paz, escoltados por efectivos de la Gendarmería, que no permitieron que vuelvan a bajar a la calle, por lo que la protesta fue desarticulada: "Repudiamos la represión del gobierno nacional en La Matanza. Hace un rato la Gendarmería reprimió a los trabajadores de la economía popular en el marco de la Jornada Nacional de Lucha contra el hambre, que acompaña el paro convocado por la mesa nacional de trasporte", escribieron en su cuenta de X, ex Twitter. 

Así como el paro fue anunciado con días de anticipación, la UTEP había hecho de público conocimiento que desde las 11 horas de este miércoles desarrollaría 500 cortes de calles con asambleas y ollas populares en todo el país. En la Ciudad de Buenos Aires, el epicentro se lleva a cabo en Plaza Constitución, donde se prevé la movilización de unas 5.000 personas, pese al protocolo antipiquetes de la ministra de Seguridad, Patricia Bullrich.

En diálogo con Javier Milei, la UTA decidió no unirse al paro aunque realizarán un corte de servicio el próximo jueves 31 de octubre, en el que se esperan que no todas las líneas de colectivos se unan.