04 Octubre de 2018 07:45
Mayo del 2013. Habían pasado 19 meses desde la inauguración del Mausoleo Néstor Kirchner, emplazado en el cementerio de Río Gallegos. La fastuosa construcción, en la que descansan desde 2011 los restos del ex presidente, resaltaba por su altura y dimensiones. Lo que pocos sabían, según la declaración de un ex funcionario de la intendencia de Santa Cruz, es que los muros construidos por Lázaro Báez y su empresa Austral Construcciones resguardaban, además del féretro, cerca de 40 bolsos con dinero sin declarar.
El mausoleo fue construido por Lázaro Báez e inaugurado en el primer aniversario de la muerte de Néstor.
El dato fue arrojado por Danilo Adolfo Penissi, quien por ese entonces trabajaba en Obras Civiles y fue uno de los tantos que testificaron ante el juez Claudio Bonadio en la causa caratulada por los medios como los “Cuadernos de la corrupción K” y que investiga el entramado del cobro de coimas por la obra pública durante las administraciones de Néstor y Cristina Kirchner.
Según el testimonio de Penissi, hubo un allanamiento realizado el “11 ó 12” de mayo de 2013 en el Mausoleo. Fue realizado por la policía provincial luego de recibir una “denuncia por droga”. “Aprovecharon que sabían del allanamiento que vendría desde Buenos Aires para retirar los bolsos que allí se escondían”, advirtió en diálogo con el ciclo A dos voces.
Máximo, Cristina y Rocío García en el cementerio.
En efecto, según su versión, el entorno de la ex presidenta aprovechó ese día para retirar del mausoleo los bolsos con dinero. “Ese dinero lo sacaron Rudy Ulloa (ex chofer del por entonces matrimonio presidencial), Fabián Gutiérrez (ex secretario de la ex presidenta y actual arrepentido en la causa de los Cuadernos) y otras seis o siete personas más. Fueron en camionetas y lo repartieron entre la Casa de Gobierno y el Casino Club de Río Gallegos”, detalló.
“Tengo entendido que eran arriba de 40 bolsos y que eso lo manejó Máximo Kirchner con Rudy Ulloa. Ese mismo día, a las nueve y media de la noche, arribó la presidenta en el Tango 01 desde Buenos Aires; supongo que para supervisar el traslado del dinero”, cerró el ex funcionario.
El Mausoleo de Kirchner, desde el aire con el dron de BigBang
El Mausoleo de Néstor: un regalo que Lázaro Báez cuidó hasta su detención
La declaración volvió a poner en el centro de todas las miradas al Mausoleo, por entonces custodiado por Báez y sus empleados en persona. La construcción comenzó meses después del funeral de Estado que recibió el ex presidente y la obra, de la que participó el artista plástico Andrés Caamaño, fue inaugurada el día que se cumplió un año de la muerte de Kirchner: el 27 de octubre de 2011.
Emplazado sobre un predio de 625 metros cuadrados, la construcción de 195 metros cuadrados sobresale por sus dimensiones: tiene once metros de altura y quince de largo. Fue construida en su totalidad con materiales patagónicos: pisos de piedras volcánicas, hormigón y pórfido sureños. Sólo desentona la enorme escalera caracol de mármol que lleva hasta el piso superior, el mismo desde el cual se puede observar a través de un vidrio el féretro del ex presidente, ubicado en el subsuelo.
El edificio ya no tiene seguridad privada y depende de la gobernación.
Las paredes tienen dos grandes imágenes de Kirchner. En la planta baja, a la que sólo tienen acceso los familiares y amigos del ex presidente, un mural color caoba de 1.5 de largo y 1.5 de alto. En la superior, una imagen del ex presidente cuando tenía nueve años. Todo iluminado con luz natural, gracias al vitral de dos metros de diámetro con el ícono del Bicentenario.
La construcción fue supervisada por la ex presidenta, aunque siempre estuvo en manos de Báez. En efecto, Cristina tuvo en su poder las llaves del lugar recién en mayo de 2016, un mes después de la detención del ahora investigado empresario de la construcción. Se la entregó el ex jefe de la custodia de Lázaro. Desde ese día, Báez se desentendió por completo del edificio.
Lázaro Báez dejó de cuidar del mausoleo un mes después de su detención.
La detención del empresario marcó el fin de una era. El mausoleo, hasta entonces, podía ser visitado por turistas o curiosos. La única condición es que no se sacaran fotos o se filmara dentro del lugar. El mantenimiento era impecable, según el relato de los vecinos. Y, además, Báez garantizaba una fuerte custodia: había tres guardias, todos empleados por Austral Construcciones, que se encargaban de cuidar el lugar y revisar a quienes ingresaban.
Desde que Báez se desentendió, las visitas ya no se permiten más. El efectivo de Infantería que tenía como consigna el resguardo del edificio lo abandonó hace más de tres años. Las puertas del mausoleo volvieron a cerrarse. Se desactivó el sistema de cámaras de vigilancia -distribuidas dentro y fuera del edificio-. Meses antes de dejar el Gobierno, la administración kirchnerista lo convirtió en un Monumento histórico y patrimonio de Santa Cruz.
Datos curiosos del mausoleo de Néstor Kirchner
Fue financiado e ideado por Lázaro Báez.
La obra duró casi un año.
Su construcción estuvo a cargo del arquitecto Roberto Gómez.
El diseño se inspiró en el mausoleo de Napoléon Bonaparte.
Báez instaló un sistema de cámaras de vigilancia y, hasta un mes después de su detención, se hizo cargo del mantenimiento del edificio y de los tres efectivos de seguridad apostados en el lugar.
Hasta 2016, podía ser visitado.
Sólo la familia tenía acceso a la planta baja en la que se encuentra el féretro del ex presidente.
Los visitantes podían verlo desde el primer piso a través de un vidrio.
Está emplazado en un terreno de 625 metros cuadrados en el Cementerio de Río Gallegos.