27 Noviembre de 2020 12:15
Alberto Fernández analizó hoy el caos que se desató en Casa Rosada y sus inmediaciones durante el velorio masivo para despedir a Diego Maradona. En línea con las acusaciones que ayer volcó por Twitter el Ministro del Interior, Eduardo "Wado" De Pedro, el primer mandatario responsabilizó a la Policía de la Ciudad por los disturbios y la represión en la 9 de Julio.
"Lamento lo que pasó, fue muy triste", reconoció el presidente, en diálogo con Radio Con Vos. "La verdad es que confiamos mucho en la conciencia social y quiero aclarar que la inmensa mayoría no participó de estos incidentes", remarcó.
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Fernández también apunto contra la administración de Horacio Rodríguez Larreta y aseguró que los incidentes comenzaron por un mal accionar de la Policía de la Ciudad, a cargo del operativo en las inmediaciones de la Casa Rosada.
"La Policía de la Ciudad le cerró el paso a la gente", denunció, al tiempo que señaló que el epicentro de los incidentes se produjo en Avenida de Mayo y 9 de Julio. "Hubo una acción desmedida y muy violenta de la Policía de la Ciudad".
De acuerdo al primer mandatario, la situación dentro de la Casa de Gobierno "nunca estuvo fuera de control", aunque reconoció que tomó la decisión de hablarles con un megáfono a las cientos de personas que lograron ingresar de forma intempestiva al Patio de las Palmeras: "Les dije que si se ordenaban iba a ser posible extender el sepelio y el velatorio, pero fue imposible. Tiraron abajo una puerta de la Casa de gobierno. Hay cosas imposibles de prever cuando se asoma la locura de un grupo de personas".
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"Vinieron muchos hinchas de fútbol, mucha de esa gente exacerbada en su ánimo que solemos ver en las canchas de fútbol; intentaron entrar de cualquier modo. Obviamente, mucha de la gente que entró en ese momento lo hizo con ánimo de hinchada de fútbol, por decirlo de algún modo. Debimos haber previsto la presencia de barrabravas", reconoció.
Pese a las críticas, el presidente ratificó su decisión de respetar el pedido de la familia Maradona de dar por terminado el velatorio a las cuatro de la tarde. "Algunos nos plantean esto como un dilema, yo no lo tengo. Es cierto que pusimos la Casa de Gobierno para un ídolo popular como no hubo otro, pero yo tengo que respetar a la familia, a sus hijas y deudos lo que deciden hacer", aclaró.
El presidente recordó además que, cuando habló con Claudia Villafañe para poner a disposición toda la estructura del Estado, una de las opciones que estuvo sobre la mesa fue realizarlo en un estadio y desestimó que el comunicado oficial de ayer tras los disturbios haya apuntado a los Maradona. "Les había ofrecido hacerlo en un lugar abierto. No le atribuí la responsabilidad a la familia, sólo respeté lo que pidieron".
Consultado sobre la participación de Cristina Fernández de Kirchner, Alberto reconoció: "No fue una reunión fría. Nos reunimos con Cristina para revisar el tema del horario y lo hablamos con Claudia. Cristina estaba muy emocionada, le contó a Claudia que le había pasado lo mismo con Néstor y que había que priorizar que la gente se despidiera, ahí es cuando se propuso extender hasta las siete de la tarde".Con los incidentes en la 9 de Julio y el posterior ingreso de los hinchas a Casa de Gobierno, las puertas volvieron a cerrarse y se dio por terminado el velorio. "Se hizo incontrolable por la presencia de estos personajes en la puerta que habían roto todos los protocolos de acceso que habían sido respetados por las miles de personas que pasaron antes. Maradona nos excede a todos. La gente iba a salir a las calles. Lo que pasó, hubiera pasado en cualquier lado. Si nos encontramos con un grupo de violentos es muy difícil, sin embargo lo resolvimos muy rápido sin que hubiera balas de goma, ni palazos; cerrando las puertas. El problema fue en la 9 de Julio", insistió el primer mandatario.
