Aníbal Fernández desestimó esta mañana los reclamos por robo de boletas y diversas argucias para modificar el resultado real de las elecciones que se celebraron ayer en la provincia de Tucumán y que, hasta ahora, los resultados dan por ganador al candidato oficialista, Juan Manzur. “Son cosas que suceden naturalmente en lugares donde no se quiere admitir que se está siendo derrotado”, justificó el jefe de Gabinete.
La Junta Electoral Provincial confirmó que se prendieron fuego 42 urnas y, con ellas, 15 mil votos.
Pese a que la Junta Electoral Provincial confirmó que hay más de 400 telegramas de mesa cuestionados y que se incineraron 42 urnas, los comicios fueron “transparentes” para Aníbal. “Fue una elección clara. No veo nada que tenga que detenerlo (al escrutinio). A corto plazo estará resuelto, pero es un triunfo de Juan Manzur muy claro”, anticipó.
“Lo hacen para encarajinar la situación. Los detenidos, que no sé si son del PRO o de la UCR, están identificados. Los comicios son sagrados
Después de desestimar los pedidos de “abrir una por urna”, el candidato a gobernador bonaerense consideró que es una “vieja expresión de los perdidosos” y que no se reclama con la expectativa de una victoria: “Lo hacen para encarajinar la situación. Los detenidos, que no sé si son del PRO o de la UCR, están identificados. Los comicios son sagrados”.
Por último, el funcionario respaldó a la cúpula tucumana: “El respeto a la voluntad popular tiene que ser incontrastable y eso es lo que han garantizado el gobernador actual (José Alperovich) y el gobernador electo (Juan Manzur)”.
En primera fila
Aníbal viajó ayer para acompañar al candidato oficialista en la primera contienda electoral después de las PASO. Lo acompañaron el candidato presidencial del Frente para la Victoria, Daniel Scioli; el secretario general de la Presidencia, Wado de Pedro, y el gobernador salterño, Juan Manuel Urtubey.
El candidato a gobernador bonaerense viajó para apoyar a Manzur en su ronda ielectoral ndividual.