Más
Política

Asociación ilícita: las incómodas similitudes entre Cristina Kirchner y Carlos Menem

Son los únicos dos ex presidentes procesados bajo esa carátula, que prevé penas de hasta 10 años. El día que el riojano fue preso.

29 Diciembre de 2016 05:07
1552080138992

Los plazos fueron similares. Cristina Kirchner fue procesada por asociación ilícita un año y 18 días después de abandonar su cargo como presidenta. Bajo esa misma carátula fue procesado Carlos Menem un año y medio después de abandonar la Presidencia, en 2001. Aunque las causas son absolutamente distintas, el proceso judicial guarda algunas similitudes. Luces y sombras de las investigaciones judiciales sobre los dos ex jefes de Estado.

Cuando el 7 de junio de 2001 Menem asistió a los tribunales federales de Comodoro Py para declarar como imputado en la causa por tráfico de armas desde Croacia pocos imaginaban lo que ocurriría luego. Aquella tarde el ex presidente quedó detenido, acusado por el grave delito de asociación ilícita, una de las máximas figuras de corrupción.

Carlos Menem fue detenido el 7 de junio de 2001 tras la indagatoria en Comodoro Py.

La diferencia con el caso de Cristina Kirchner es central. La ex presidenta atraviesa el procesamiento en libertad. Lo mismo le ocurrió con la otra causa que más la complica, la venta de dólar a futuro, que incluso está cerca de ser elevada a juicio oral, lo que podría ocurrir en febrero. Tras la indagatoria, Menem quedó detenido -con el beneficio de la prisión domiciliaria- cosa que no ocurrió con Cristina, quien se presentó ante el juez Julián Ercolini el 31 de octubre pasado y declaró en el marco de la causa que investiga el direccionamiento de la obra pública vial en favor de Lázaro Báez.

A pesar de que las causas son muy distintas, tienen un punto en común: la carátula con que el juez decide procesarlos. El delito de asociación ilícita es uno de los más graves del Código Penal: en su artículo 210 establece que las penas pueden ser de entre tres y 10 años de cárcel.

Julián Ercolini procesó ayer a la ex presidenta, a Julio De Vido y a José López.

Según el Código, los jefes u organizadores de la asociación podrían afrontar penas mínimas de cinco años de prisión o reclusión. Muchas de las causas por corrupción de funcionarios públicos son investigadas bajo esa carátula. En el caso de la Argentina, para que se considere que existe "asociación ilícita" tiene que haber al menos tres personas que, agrupadas y con un objetivo claro, cometan actos contrarios a la ley.

En el caso del procesamiento dictado ayer por el juez Ercolini ocurre eso. Además de Cristina, procesó a varios de sus ex funcionarios y allegados: el ex secretario de Obras Públicas, José López, el ex ministro de Planificación, Julio De Vido, y el supuesto socio comercial de la familia Kirchner, Lázaro Báez, son solo algunos de ellos.

El ex presidente estuvo detenido varios meses, hasta que en noviembre de 2001 lo liberaron.

El caso de Menem fue distinto por varias razones. En primer lugar, la causa en la que era investigado por el juez federal Jorge Urso estaba vinculada con el tráfico de armas a Ecuador y Croacia. Tiempo después de ser detenido, el 21 de noviembre de 2001, el ex presidente fue liberado luego de que un fallo de la Corte Suprema revocara el delito de asociación ilícita.

Sin embargo, más de una década después, Menem fue condenado a siete años de prisión por el delito de “contrabando agravado”, que no cumplió debido a que la sentencia no está firme. A sus 86 años, el ex jefe de Estado tiene un cargo que lo habilita, entre otras cosas, a tener fueros: es senador por su provincia, La Rioja.

Ayer Cristina criticó con dureza la decisión de procesarla del juez federal Julián Ercolini.

En su caso, la "asociación ilícita" era con funcionarios de su gobierno con quienes firmó decretos secretos para permitir el contrabando de las armas argentinas a países que no podían comprar armas porque se encontraban en guerra, como Croacia. Pero también Ecuador, que estaba en conflicto con Perú por la Cordillera del Cóndor.

En el caso de Cristina, Ercolini cree que la asociación ilícita fue conformada por Néstor Kirchner, pero que continuó con ella en el poder. Involucra a Báez como uno de los principales socios y beneficiarios del kirchnerismo. No es casual: el empresario dueño de Austral Construcciones se favoreció con más del 70 por ciento de la obra pública vial en Santa Cruz.

Menem y Cristina (en la foto, con Néstor Kirchner), los únicos dos ex presidentes procesados por asociación ilícita.

Tanto Menem como Cristina son los únicos presidentes de la democracia que fueron imputados y luego procesados por asociación ilícita tras su salida del Ejecutivo. En el caso de Cristina, incluso, le llevó menos tiempo que al riojano. En el procesamiento, Ercolini aclaró que Cristina no era la jefa de la asociación ilícita, sino que ese rol lo habría ocupado el propio Kirchner, fallecido en octubre de 2010.