El resultado de las PASO dejó conforme a Mauricio Macri, quien ahora deberá rever parte de su estrategia de cara a octubre con un solo objetivo: profundizar la polarización con Daniel Scioli a fin de erigirse como la única alternativa opositora.
El buen desempeño de Sergio Massa también dejó en evidencia un tema clave para el PRO: ¿hubiera sido preferible cerrar un acuerdo con el Frente Renovador que permita ganar o pelear con el kirchnerismo la Provincia de Buenos Aires? Aunque ayer en el búnker de Costa Salguero de Cambiemos hubo voces en ese sentido, la estrategia de Jaime Durán Barba de no “mezclarse” con la “vieja política” y, sobre todo, con el PJ, fue en sentido contrario.
El festejo del búnker de Cambiemos.
En este contexto, para Macri será clave intentar conseguir el voto útil opositor. Es decir, captar aquel votante que busca desalojar al kirchnerismo y creyó que el ex intendente de Tigre era la mejor opción para ello.
Como ocurrió con el menemismo, en el PRO aseguran que el 60% de los votantes desea un cambio y que nadie como el jefe de Gobierno porteño puede expresarlo. Es por ello que la búsqueda del voto útil que sirva como catapulta para desalojar al kirchnerismo del poder será clave.
Papelitos para Macri.
Con la mira en el norte
Otro punto clave será reforzar sus viajes por el norte del país, donde el Frente para la Victoria arrasó. Es que en el NOA y NEA sufrió duras derrotas. Por caso, en Chaco perdió 54% a 26%; en Formosa 60% a 17% y en Tucumán 57% a 20%, entre otras. Este fenómeno se explica por dos motivos centrales: en primer lugar la fortaleza del PJ y sus candidatos locales, y en segundo lugar, y ligado a esto, por la falta de figuras fuertes de la oposición.
En el búnker del PRO se vivió un clima de optimismo.
De todas formas, ayer Macri estuvo contento en el búnker de Costa Salguero. Llegó acompañado por su mujer, Juliana Awada, y su pequeña hija Antonia. Se abrazó con Elisa Carrió y con Ernesto Sanz, sus contrincantes en la interna, y quedaron en verse las caras nuevamente en la semana. Para el líder del PRO será clave mostrar la unidad del frente Cambiemos y pensar en retener el voto radical, en particular pensando en los candidatos a intendente que puedan asegurar el territorio.